Todo lo que se sabe de los incendios que consumen la Amazonía
Aunque la preocupación se ha concentrado en Brasil, la emergencia también se ha extendido hacia Perú y en Bolivia, donde se investiga la intencionalidad en la generación del fuego.
El bosque de la Amazonía, el que con sus 5,5 millones de kilómetros cuadrados es calificado como el “pulmón verde” del planeta, lleva varias semanas afectado por una serie de incendios, en una situación que se ha agravado a tal punto que ha motivado la atención y la solidaridad de todo el mundo.
Aunque los efectos del fuego quedaron en evidencia durante esta semana -especialmente luego que la ciudad de Sao Paulo quedara a oscuras por el humo-, las llamas llevan varios días consumiendo miles de hectáreas, perjudicando especialmente a las comunidades indígenas que viven en la zona.
Expertos e investigadores han entregado diversas teorías sobre el origen de lo ocurrido, las que van desde los efectos del cambio climático hasta las políticas agroindustriales del polémico mandatario brasileño Jair Bolsonaro. Aquello tendrá una respuesta definitiva recién cuando el fuego se controle y se conozcan las consecuencias reales del inminente desastre ecológico.
El origen y la extensión en Bolivia
El fuego consumió ocho casas en Bolivia (ABI)
La selva del norte de Brasil lleva dos semanas en una situación crítica de siniestros. Aunque desde 2013 hay antecedentes sobre grandes incendios que han consumido grandes extensiones de la Amazonía, durante estos últimos días se han registrado eventos preocupantes y muchos más extremos que los anteriores.
Paulo Moutinho, investigador del Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (Inpe), afirmó que la desforestación sería el factor clave que provocó el aumento de los incendios en 2019. La situación climática estaría eventualmente descartada, porque si la región estuviese afectada por una sequía “todo sería peor”. En estos casos “la mano del hombre” estaría de parte de los agricultores y ganaderos, que queman pastizales para despejar sus tierras.
Aunque la situación se originó principalmente en Brasil, Bolivia también está en un estado de alerta por las llamas que afectan a su propia porción de la selva.
Desde hace una semana se han registrado incendios focalizados en el departamento de Santa Cruz, fronterizo con Brasil y Paraguay, y que han provocado la destrucción del Bosque Seco Chiquitano, una región de transición entre la Amazonía y el Chaco. En total son 744.711 las hectáreas arrasadas, una cifra superior a la brasileña.
Al menos 1.817 familias están siendo afectadas por la emergencia y ocho casas resultaron completamente destruidas. Todo esto llevó a que el presidente Evo Morales contratara al avión estadounidense Supertanker para colaborar en el control del fuego, el que según los primeros antecedentes es de origen intencional.
Las imágenes falsas de la emergencia
Una imagen falsa difundida por Cara Delevingne.
Los incendios que afectan a la región están ubicados en zonas de accesos complejos, por lo mismo ha sido muy difícil sacar fotografías para determinar su real dimensión. Por esto, las redes sociales se han llenado de imágenes falsas sobre la emergencia.
Las postales de un bosque quemado en 1989, una mona abrazando a su cría y un conejo carbonizado fueron compartidos como reflejo de lo que supuestamente estaría pasando ahora. Miles de usuarios y famosos como Leonardo DiCaprio, Jaden Smith y Cara Delevingne difundieron esos registros falsos.
Además de esto, durante el jueves se rumoreó de una supuesta lluvia en la zona, la que fue descartada por los medios oficiales.
La ayuda internacional
Tanto a Brasil como Bolivia se les ha ofrecido ayuda desde diversos países. Uno de ellos es Venezuela, que afirmó que entregará su “modesto” aporte pese al enfrentamiento que mantiene Bolsonaro con el presidente Nicolás Maduro.
Desde Colombia -que también está amenazada por el fuego en su porción de la Amazonía- el mandatario Iván Duque, ofreció su colaboración a los gobiernos vecinos para combatir “la tragedia ambiental” que implican los incendio.
En Chile, el presidente Sebastián Piñera ofreció su ayuda tanto a Brasil como a Bolivia. El ministro de Agricultura, Antonio Walker, afirmó que la experiencia de los guardabosques nacionales con este tipo de emergencias podría ser útil para controlar las llamas.
Desde Europa, en tanto, también expresaron su preocupación pero también se han mostrado críticos con las gestiones de los gobiernos involucrados. Noruega decidió congelar su ayuda millonaria a Brasil debido a las políticas de Bolsonaro mientras que el presidente francés Emmanuel Macron acusó al mandatario de “mentir” sobre su compromiso medioambiental.
