Mike Hughes: el piloto terraplanista que murió en un cohete casero intentando demostrar su teoría
"Fue siempre su sueño hacer este lanzamiento, y el Science Channel estaba allí para documentar su viaje", indicaron desde Discovery.
Mike Hughes, un piloto que defendía la “teoría terraplanista”, murió al precipitarse con un cohete casero que el mismo fabricó y con el que buscaba demostrar que la Tierra es plana.
Su invento fracasó y el aventurero perdió la vida en el desierto de California, en Estados Unidos, mientras grababa el programa de televisión Homemade Astronauts (Astronautas Caseros) y que será estrenado este año en la cadena Science Channel, propiedad de la productora Discovery.
La muerte de Hughes, quien se describía a sí mismo como el “mayor temerario del mundo” y recibía el apodo de “Mike, el loco”, fue grabada justo cuando el terraplanista era disparado al cielo en su cohete casero y al mismo tiempo que su paracaídas verde se desprendía del proyectil. En ese momento, el ingeniero se precipitó al suelo y falleció en el lugar.
“Fue un shock para todo el mundo. No sabían qué hacer”, dijo el periodista Justin Chapman a algunos testigos del accidente.
Según el sitio web del canal Discovery, Hughes, de 64 años y defensor de que la Tierra es plana, había construido un cohete que funcionaba a vapor para ser lanzado a 5.000 pies de altura, unos 1.524 metros, como “primer paso hacia metas más ambiciosas en la exploración espacial”.
“Fue siempre su sueño hacer este lanzamiento, y el Science Channel estaba allí para documentar su viaje”, indicaron desde Discovery.
“Nuestros pensamientos y oraciones van con su familia y amigos en este momento difícil”, lamentó la productora.
Asimismo, el objetivo a largo plazo que comentaba el terraplanista a sus cercanos era desarrollar un proyectil que lo lanzara a 62 millas (casi 100 kilómetros) de altura, donde la atmósfera terrestre entra en contacto con el espacio exterior, con el fin de comprobar su teoría.
El año 2018, Hughes logró de manera exitosa lanzarse con un cohete casero hasta los 1.875 pies (571 metros) de altura sobre el desierto de Mojave, en Estados Unidos, aunque en esa ocasión no tuvo problemas para volver al suelo porque su paracaídas funcionó.