Cómo la TV internacional se acomodó en medio del impacto del coronavirus

Una de las medidas que se ha adoptado en gran parte del mundo para disminuir la tasa de contagios de coronavirus (COVID-19) es la cuarentena preventiva, situación que impactó de lleno en los canales de TV.

Claro ejemplo es lo ocurrido en nuestro país, donde las estaciones han debido tomar resguardos y detener las grabaciones de algunos programas como Pasapalabra y Bailando Por Un Sueño. En otros canales, se ha optado por el reestreno de teleseries nacionales y extranjeras, o simplemente la repetición de episodios.

También se han aventurado en nuevos formatos, como el utilizado por Francisco Saavedra en Abrazo En Línea, docureality que se graba de manera íntegra a través de videollamadas.

Pero Chile no es el único país que ha debido adaptarse a la nueva realidad que impuso el coronavirus. En Estados Unidos, Canadá, Argentina y Colombia también hay casos de contenido televisivo que ha debido cambiar ante el nuevo escenario.

Series suspendidas y late shows desde el hogar

Tal y como ocurrió con las teleseries en nuestro país, en Estados Unidos debieron suspender las grabaciones de diversas producciones de TV por el coronavirus. Uno de los más golpeados con esto fue Netflix, empresa que luego de que Donald Trump declarara una “emergencia nacional”, tuvo que detener la generación de sus contenidos, debiendo esperar meses para retomarlos.

Misma situación ocurre con las series que se graban en Canadá, como The Good Doctor (ABC), Riverdale (WB) y The Flash (The CW), las que deberán continuar esperando con paciencia lo que pueda ocurrir en los próximos meses.

De hecho, otras han tenido que adelantar sus finales de temporada, como fue el caso de Grey’s Anatomy (ABC), quienes tenían 25 episodios para su temporada 16, pero finalizaron en el capítulo 21 y han debido replantearse cómo partir el próximo ciclo.

La Oficial de Salud Provincial de Columbia Británica en Canadá, Bonnie Henry, declaró a TV Line que “es cada vez más (improbable) que podamos volver a la vida normal para cuando llegue el verano, en el mejor de los casos. Y tenemos que empezar a prepararnos para una posible segunda ola en otoño”.

Esto significa que aquellos fanáticos que esperan que sus series favoritas regresan durante septiembre u octubre, pueda prolongarse un poco más.

Quienes sí han logrado sobrevivir son los late shows norteamericanos como Jimmy Kimmel Live, The Late Late Show con James Corden y The Tonight Show con Jimmy Fallon. Estos espacios han logrado reorganizarse y grabar los monólogos de sus conductores desde sus casas y realizar entrevistas a través de videollamadas. Además, se han volcado a incentivar a los televidentes para que realicen donaciones a organizaciones que luchan contra el coronavirus y las consecuencias que ha generado en la población.

Dentro de lo novedoso de los nuevos formatos, es que los invitados musicales también han podido marcar presencia con sus respectivos shows desde sus casas. Un ejemplo claro fue lo realizado por la cantante inglesa Dua Lipa hace solo unos días.

Medidas gubernamentales

En Colombia, el gobierno intervino de lleno en la industria televisiva. El Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones emitió un decreto el pasado 4 de abril donde establecieron “nuevas medidas para la prestación del servicio de televisión abierta radiodifundida en el territorio nacional”.

Con esto, buscaban garantizar la continuidad de la prestación de servicios bajo las nuevas reglas impuestas por las autoridades para evitar nuevos contagios de coronavirus, como el distanciamiento social.

“Adicionalmente, se garantiza la destinación de recursos para el funcionamiento de la televisión regional, herramienta esencial para la cultura e identidad nacional, de forma que no se afecte su operación”, agregaron las autoridades.

El decreto establece nuevos porcentajes mínimos de programación de producción nacional, que deben cumplir trimestralmente los canales de televisión abierta nacional mientras dure el estado de emergencia.

Así, desde las 19:00 a las 22:30 horas, la programación nacional será del 20%; de las 22:30 a las 24:00 horas, la programación nacional será del 20%; de las 00:00 a las 10:00 horas, la programación se mantendrá 100 % libre; de las 10:00 a las 19:00 horas la programación de producción nacional será del 20%. En sábados, domingos y festivos el porcentaje de producción nacional mínima corresponderá al 20% en horario de 19:00 a 22:30 hrs.

Esto, sin embargo, excluye a los noticiarios, la que “se mantendrá en las mismas condiciones y proporción realizada por los canales nacionales, regionales y estaciones locales a la fecha de la declaratoria de la emergencia económica, social y ecológica”, consigna la norma.

Al otro lado de la cordillera

En Argentina se vive una situación similar a la chilena, donde algunos programas de TV han debido ser cancelados a causa del coronavirus. Tal es el caso de la versión trasandina de Pasapalabra que, a diferencia de la edición nacional, optaron por sacar de pantalla después de cuatro años, siendo emitido el último episodio el pasado 10 de abril. En su reemplazo comenzó a emitirse el programa Mamushka, conducido por Mariana Fabbiani.

Uno de los más afectados fue Marcelo Tinelli, quien ha tenido que postergar su estelar Showmatch para prevenir que los integrantes del equipo se contagien del virus.

Al igual que el animador, Mirtha Legrand, al ser parte de uno de los grupos de riesgo, tuvo que resguardarse en su casa y ser reemplazada por su nieta, Juanita Viale, en el programa Separadas.

Por otro lado, quienes están afiliados al Sindicato Argentino de Televisión, Servicios Audiovisuales, Interactivos y de Datos (Satsaid), optaron porque los mayores de 65 años se mantuvieran en sus hogares, al igual que las madres de niños en edad escolar. En tanto, los turnos en televisión tienen que ser rotativos.

Programas como Hay Que Ver de Canal 9 o Intrusos de América TV, han optado por reducir sus panelistas y mantener la distancia de un metro, que es lo que han recomendado los especialistas para evitar contagiarse de coronavirus.