Quiénes son los tres voceros de la OMS durante la pandemia del coronavirus
Tedros Adhanom, Maria Van Kerkhove y Mike Ryan son las figuras claves al interior del organismo internacional y han debido ser el rostro visible de la peor crisis sanitaria en un siglo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) está enfrentando una de las peores crisis sanitarias en un siglo debido a la pandemia del coronavirus, la que ha sido manejada por tres figuras claves, las que se transformaron en los voceros del organismo ante la comunidad internacional.
El director general Tedros Adhanom; la directora de la Unidad de Zoonosis y Enfermedades Emergentes, Maria Van Kerkhove; y el director Ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias, Mike Ryan, han sido los rostros visibles de una emergencia que aún está fuera de control.
La palabra de cada uno de ellos es una guía para la comunidad científica internacional, por lo que cualquier error en la información genera una gran controversia. En varias oportunidades han caído en contradicciones, las que en gran parte se justifican debido a que el COVID-19 es una enfermedad aún desconocida.
Los voceros, que se han movido principalmente en el ámbito de la ciencia por sobre el político, son los defensores directos de una OMS que ha recibido diversos ataques, especialmente desde el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien los acusó de negligentes y de actuar con condescendencia con China.
El director
Tedros Adhanom. (OMS)
Tedros Adhanom Ghebreyesus es un inmunólogo oriundo de Eritrea, quien antes de arribar a la OMS tuvo una importante carrera política en su país. Militante del partido de izquierda Frente de Liberación Popular de Tigray, se desempeñó como ministro de Salud entre 2005 y 2012 durante los gobiernos de Meles Zenawi y Hailemariam Desalegn, y de Relaciones Exteriores entre 2012 y 2016.
En 2009 fue elegido como presidente de The Global Fund, una organización que trabaja en la lucha contra el VIH/SIDA, malaria y tuberculosis. Desde ahí despegó una trayectoria diplomática y sanitaria, la que le permitió ser elegido como director general de la OMS en 2017, siendo además el primer africano en ocupar el puesto.
Como líder de la organización ha sido el objeto de la mayoría de los cuestionamientos, principalmente de parte de Trump, quien lo acusa directamente de favorecer a China considerando su propio pasado como militante de un partido marxista etíope.
Los cuestionamientos del republicano se basan en las primeras declaraciones de Tedros a propósito de la pandemia, donde afirmaba que el gigante asiático estaba siendo “transparente” con la información que entregaba sobre el brote en Wuhan.
El director ha evitado entrar directamente en la polémica y pidió ser juzgado por sus acciones una vez que la pandemia sea totalmente controlada en todo el mundo.
La epidemióloga
Maria Van Kerkhove. (Foto: OMS)
Maria Van Kerkhove es una de las figuras claves en el manejo de la pandemia y es una de los tres voceros de la OMS. Es estadounidense y estudió medicina en la Universidad de Stanford. Obtuvo un Ph.D. en epidemiología de enfermedades infecciosas en la London School of Hygiene & Tropical Medicine, donde escribió su tesis sobre la gripe aviar en Camboya.
Desde 2009 trabaja como asesora del organismo internacional con sede en Ginebra, apoyando en la mesa técnica por la aparición del MERS-CoV. Tras el surgimiento del COVID-19 fue la encargada de dirigir las acciones principales para tomar medidas sobre una enfermedad que tenía como único antecedente cercano el brote de SARS de 2003.
Una de sus principales controversias ocurrió el 8 de junio pasado, cuando afirmó que según los datos disponibles era “muy inusual” que los asintomáticos del coronavirus pudieran contagiar, lo que contradecía las advertencias de gran parte de los científicos sobre el tema. Al día siguiente la experta retrocedió y dijo que todo fue un “mal entendido”.
El cirujano
Mike Ryan. (Foto: OMS)
El irlandés Mike Ryan es un cirujano y epidemiólogo especializado en enfermedades infecciosas. Estudió en la Universidad Nacional de Irlanda, Galway, y trabaja en Ginebra desde 1996, siendo un referente en la respuesta de diversas pandemias.
Es miembro fundador de la Red Mundial de Alerta y Respuesta ante Brotes Epidémicos (GOARN), ocupando los puestos de Coordinador de la Respuesta a Epidemias (2000-2003). Fue coordinador operativo de la respuesta al brote de SRAS (2003) y director de Alerta y Respuesta Mundiales (2005-2011).
A diferencia de los otros voceros de la OMS, Ryan ha sido el más directo y no ha mostrado ningún matiz sobre la gravedad del SARS-CoV-2, admitiendo públicamente el desconocimiento generalizado que existe sobre sus efectos.
En mayo, Ryan afirmó que es posible que el coronavirus “nunca desaparezca” y que puede convertirse en un virus endémico en la comunidad. También advirtió sobre lo devastador que sería el paso de la enfermedad en América y África.
Recientemente, el médico reconoció que aún no se sabe si el invierno agrava más o no la propagación del virus, lo que abrió la puerta a una posible segunda ola en el norte de Asia, Europa y Estados Unidos, y a un posible agravamiento de los casos en Sudamérica.
