Kanye West, la polémica figura que se sumó a la carrera presidencial de Estados Unidos
El esposo de Kim Kardashian busca convertirse en el sucesor de Donald Trump, dejando atrás una vida marcada por las críticas en medio de una premiada carrera musical.
Aunque dentro de sus planes la política estaba programada para el 2024, en los últimos días Kanye West sorprendió al mundo al anunciar su entrada a la carrera por la presidencia de Estados Unidos. Fue en plena celebración del 4 de julio que el artista dio a conocer su decisión a través de su cuenta de Twitter.
“Ahora debemos darnos cuenta que la promesa de Estados Unidos es confiar en Dios, unificar nuestra visión y construir nuestro futuro. Me postularé para presidente de Estados Unidos”, fueron las palabras del intérprete de Power, quien tiene un mes más para ratificar su postulación a la Casa Blanca, sumándose a Donald Trump y Joe Biden.
Para llegar a este punto, West ha debido sortear una vida marcada por las polémicas, no solo en su ámbito personal tras haber contraído matrimonio con Kim Kardashian en 2014, sino que también musical, pese a ser galardonado con múltiples premios y vender millones de discos en todo el mundo.
La eterna disputa con Taylor Swift
Sin lugar a dudas, una de los grandes hitos en la historia de Kanye West ha sido la polémica que lo vincula a Taylor Swift y que, pese a que ella ha intentado dejarlo atrás, la persigue hasta el día de hoy.
Ocurrió el 13 de septiembre de 2009, en plena ceremonia de los MTV Video Music Awards de ese año, cuando la cantante subió al escenario para recibir el premio a Mejor Video Femenino. Pero cuando estaba dispuesta a entregar su discurso de agradecimiento, el rapero le arrebató el micrófono.
“Taylor, estoy realmente feliz por ti y voy a dejar que termines de hablar, pero el video de Beyoncé es uno de los mejores videos de la historia. ¡Uno de los mejores de la historia!”, dijo ante un público que en lo único que se fijaba era en cómo Swift era víctima del impulsivo Kanye West.
Dos días después, el mismo Kanye apareció en el programa de Jay Leno asegurando que “fui un maleducado, punto. Y no voy a intentar justificarme porque sé que aquello estuvo mal”. En tanto, en el programa de Oprah Winfrey, Taylor confirmó que había recibido un llamado del rapero para disculparse con ella. “Fue muy sincero en sus palabras, así que acepté sus disculpas”, afirmó.
Un año después, en 2010, la cantante lanzaría su canción Innocent, la que contiene la frase “Lo que eres no es lo que hiciste, todavía eres un inocente”, algo que a West le llamó la atención y provocó que dejara de lado su postura pacifista, cambiando completamente su discurso e inició todo un ataque en contra de la artista.
“Gracias a mi interrupción Taylor ha conseguido salir en la portada de 100 revistas y ha vendido un millón de copias de su nuevo disco”, lanzó.
Tres años más tarde, y en medio de la promoción de su álbum Yeezus, Kanye mantenía su postura confrontacional y reveló al New York Times que las disculpas públicas hacia Taylor fueron solo “por la presión pública, pero no me arrepiento de nada”. Incluso recalcó que “si alguien espera de mí una disculpa plana y sin sentido, mejor que dejen de leer esta entrevista ahora mismo”.
Pese a todo, en la ceremonia de los VMA de 2015, es la misma Taylor Swift la encargada de entregarle a Kanye West el premio Michael Jackson Video Vanguard Award.
Cuando todo parecía que la disputa entre ambos había llegado a su fin, vino un contragolpe sorpresivo por parte del cantante. En su nuevo disco The Life of Pablo, incluyó la canción Famous con una frase que no dejó a nadie indiferente: “Siento que Taylor y yo todavía podríamos acostarnos. ¿Por qué? Porque yo hice famosa a esa perra”.
Los medios rápidamente se acercaron a él para conocer más respecto a la composición de la letra y él aseguró que Swift estaba al tanto del contenido de la canción y que, incluso, había recibido su aprobación tras haber hablado por teléfono. Ella permaneció en silencio, hasta que en febrero de 2016 subió al escenario de los Grammy a recibir el premio a Mejor Disco del Año por su álbum 1989, dando un potente discurso de agradecimiento.
“Soy la primera mujer en ganar dos veces el premio al Mejor Álbum del Año, y por eso quiero decir a todas las mujeres jóvenes que sepan que habrá gente en el camino que tratará de despreciar tu éxito o llevarse el crédito por tus logros o tu fama. Pero si te centras en el trabajo y no dejas que esa gente te confunda, algún día llegarás a tu destino, mirarás a tu alrededor y sabrás que fuiste tú y la gente que te quiere los que te pusieron aquí arriba, y será el mejor sentimiento del mundo”, afirmó.
Meses más tarde, entraría en el conflicto Kim Kardashian, quien se vería involucrada al salir en defensa de su esposo , asegurando que tenía grabada la llamada telefónica donde Taylor Swift le daba la aprobación a Kanye West respecto a lanzar la canción Famous.
A través de Snapchat, la influencer reveló el diálogo entre los artistas donde él le aseguraba que “no quiero hacer rap que haga sentirse mal a la gente”, mientras ella le decía que “es casi un cumplido”.
Ante esto, la cantante publicó en Instagram lo siguiente: “¿Dónde está el vídeo de Kanye diciéndome que iba a llamarme ‘esa perra’ en su canción? No existe porque nunca pasó. No puedes intentar controlar la respuesta emocional de alguien que ha sido llamada “perra” frente a todo el mundo. Por supuesto que yo quería que me gustara la canción. Quise creer en Kanye cuando me dijo que me iba a encantar la canción. Quería que ambos pudiéramos tener una relación amistosa”.
La versión de la intérprete se confirmaría años después cuando una cuenta en redes sociales publicó nuevamente el video de la conversación entre Swift y West, en donde evidentemente el rapero omitió que la palabra “perra” iba incluida.
Kanye y la religión
A principios del 2019, Kanye West se volcó a la religión completamente. Comenzó a asistir a los servicios dominicales y tras meses de trabajo lanzó su disco Jesus is King, asegurando en una entrevista que ya no era un artista sino que un “innovador cristiano”.
“Ahora que estoy al servicio de Cristo, mi trabajo es difundir el evangelio, hacer que la gente sepa lo que Jesús ha hecho por mí. Hubo un tiempo en el que hablaba de lo que la moda hizo por mí o de lo que el cognac hizo por mí, pero ahora hablo de lo que Jesús ha hecho por mí. Ya no soy esclavo, ahora soy un hijo de Dios, libre”, dijo en una entrevista en octubre de ese año Radio Beats 1 de Apple Music.
En este nuevo periodo de su vida lo único que hizo fue agradecerle “a Dios por salvarme mental, física y espiritualmente” luego de años de adicción al alcohol y a la pornografía. De hecho culpó a esto último de su incidente con Taylor Swift en 2009 y que dio inicio a años de rivalidad.
De hecho, también le trajo problemas con Kim Kardashian, a quien en más de una oportunidad se enfrentó por los escotes sexys que usaba en distintos eventos, pero que han logrado superar. Incluso, ella apoya a este nuevo Kanye religioso: “Es una experiencia curativa para él”, afirmó.
El mismo artista ha encabezado innumerables servicios dominicales donde ha presentado su material.
Performing his timeless classic “Jesus Walks” from his album, The College Dropout, @kanyewest closes out “Sunday Service” for #HowardHomecoming . @PUSHA_T #HUHC19 pic.twitter.com/NqwEJU82mb
— Howard University (@HowardU) October 12, 2019
Política al estilo Kanye
En las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos, Kanye West manifestó abiertamente su apoyo a Donald Trump, a quien posteriormente visitó en la Casa Blanca tildándolo de “héroe”.
De hecho, al ser consultado por una carrera presidencial, aseguró que eso no sería posible antes de 2024, pensando en dos periodos con el magnate a la cabeza del país.
Durante su visita a la casa de gobierno, West estuvo con el tradicional jockey rojo con la frase “Make America Great Again (Hagamos América grande de nuevo) y solo llenó de elogios al mandatario.
“La gente cree que por ser negro tengo que ser demócrata. Trump está en su viaje de héroe ahora mismo. Puede que no pensara que tendría a un loco hijo de puta como yo”, dijo a la prensa en ese entonces.
Previo a este episodio, en una entrevista con TMZ, ya había generado polémica al hablar de la esclavitud, tildándola de una “opción” y ante las críticas tuvo que salir a explicarse: “Sé por supuesto que los esclavos no fueron encadenados y embarcados porque así lo quisieran”, agregando que “no podemos permanecer mentalmente prisioneros durante los próximos 400 años”.
Las relaciones de West y Trump continuaron, por lo menos, hasta marzo de este año. En The Wall Street Journal, y en alusión al nuevo slogan de campaña del magnate expresó: “Una de mis cosas favoritas sobre lo que representa la gorra de Trump (Keep America Great -Mantengamos a América grande-) es que la gente no puede decirme qué hacer porque soy negro. Cambiaremos el mundo. Dios está de mi lado. Soy cristiano. Soy un contribuyente. Yo soy yo mismo. Dios está con nosotros”.
Pero dicho apoyo no duraría mucho. Casi tres meses más tarde, Kanye anunciaría su candidatura presidencial.
Los lineamientos de su postulación
A pocos días de realizar el anuncio oficial a través de Twitter, Kanye West otorgó una entrevista a la revista Forbes, donde no solo reveló que padeció de COVID-19, sino que también se sinceró respecto a diversos temas como las vacunas y el aborto, confirmando además que correrá de manera independiente puesto que Trump lo hará bajo el alero del Partido Republicano.
Es así como, ante una posible cura para el coronavirus, el rapero expresó que “son tantos de nuestros niños que están siendo vacunados y paralizados… Entonces, cuando dicen que la forma en que vamos a curar el COVID es con una vacuna, soy extremadamente cauteloso”. Y es que para él, esta vacuna era “la marca de la bestia (el Diablo)”.
“Quieren poner chips dentro de nosotros, quieren hacer todo tipo de cosas para que no podamos cruzar las puertas del cielo. Lo siento cuando digo que ellos, los humanos que tienen al Diablo dentro de ellos. Y lo triste es que, lo más triste es que no todos llegaremos al cielo, que habrá algunos de nosotros que no lo logremos”, continuó.
En cuanto al aborto, dejó en claro que era “pro vida, porque sigo la palabra de la Biblia”. En otros temas, como inmigración, impuestos, política exterior aseguró que no tenía una opinión aún porque no estaba informado al respecto.
Respecto a su decisión de postularse a la Casa Blanca, indicó que es algo que ha conversado desde hace años y tomó la decisión de meterse en la carrera luego de que la gestión de Trump fuera un “desastre”, particularmente tras las múltiples protestas que se originaron por el asesinato de George Floyd.
“Para los otros candidatos, les sugiero que se retiren con gracia: Trump y Biden, que se retiren con gracia. Es el país de Dios, estamos haciendo todo al servicio de Dios, y nadie más que a Dios. Estoy al servicio de nuestro Señor y Salvador, Jesucristo, y pongo todo en juego para servir a Dios ”, advirtió.