Eduardo Fuentes: “Qué pena que la gente sienta que los medios los han tenido desamparados”

En las últimas semanas, el programa Mentiras Verdaderas, conducido por Eduardo Fuentes, ha experimentado una alza sostenida en el rating, pasando de 3,9 a 5,1 puntos. De hecho, en varias oportunidades, la apuesta de La Red ha logrado alcanzar a programas como Jesús de CHV y Soltera Otra Vez de Canal 13.

Este repunte, el animador lo atribuye a que las temáticas que se han mantenido en los últimos meses, como el estallido social y la pandemia del coronavirus, son temas que “para nosotros no eran desconocidos porque, de una manera u otra, independiente de que teníamos variedad de enfoques, siempre estábamos hablando de la perspectiva del ciudadano respecto de lo que pasa en el día a día. Nuestro foco siempre ha sido eso, no como lo vivimos nosotros, sino la gente en la calle y enfocarnos desde ahí, desde esa problemática, desde esa realidad”.

Un ejemplo de ello, según lo representó el comunicador en conversación con EL DÍNAMO, fue lo ocurrido el 18 de octubre de 2019, un hecho que como equipo fue “estar en nuestra salsa, porque era lo que habíamos hablado, pero esta vez potenciado porque había mucho interés de la gente”.

“Con la pandemia lo mismo. Si bien en un principio fue estrictamente médico, epidemiológico, empezamos a conocer estas curvas y todo el trabajo desde la ciencia, y evidentemente esto iba a tener repercusión en lo social, en lo político y en lo económico, por lo tanto estábamos preparado para abordar eso. Empezamos a mirar la coyuntura desde ese punto de vista. Yo siento que, finalmente, esto que ha pasado nos ha afianzado en lo que ya veníamos haciendo y por eso creo que se ha potenciado la audiencia”, expresó.

Eduardo Fuentes destacó además que muchos de sus invitados comenzaron a ser parte de los paneles de distintos matinales, quienes dieron un vuelco en sus contenidos para abordar la contingencia en el país, tanto para el estallido social como para la pandemia.

Ante este escenario, el animador recalcó que el factor que los diferencia de estos programas, “tiene que ver con la capacidad o línea editorial que te ofrezca cada medio. No digo que uno sea mejor que otro, lo digo en el sentido de que la gente que escucha La Red, por una cuestión natural, tenemos más capacidad de movimiento porque tenemos una banda más ancha, por decirlo de alguna manera, que quizás otros medios u otros pensarán distinto, da lo mismo”.

Esto significa que la gente puede “decidir con qué enfoque o qué mirada se queda, y eso es súper bueno porque hay público para todo. Yo no creo que nuestra propuesta sea la mejor, pero es la que a nosotros nos agrada y a la que a un público le agrada, pero no es mejor ni peor que otra”.

Invitados diversos

Sobre esto último, Eduardo Fuentes se detiene al destacar la variedad de invitados con los que han contado en cada uno de sus episodios, pasando de un político a un artista, o de un defensor del retiro de las pensiones a alguien que se opone completamente a esta iniciativa.

Para Fuentes, ante esta diversidad, no existe un blanco o negro, ya que “a nosotros lo que nos interesa es aquel que va a hablar al programa y tenga algo interesante que decir, que tenga una mirada, un punto de vista y un argumento que sostiene ese punto de vista”, lo que incluye panelistas que pueden ser polémicos en sus declaraciones.

Eso sí, asegura que “no siempre estoy de acuerdo con lo que plantea nuestro invitado, evidentemente, pero trato de entenderlo y trato de buscar el por qué esa persona piensa como piensa y desde ahí que él desarrolle su discurso. Tampoco soy yo la persona que tiene que decirle a la gente lo que es bueno y lo que es malo, porque la gente que nos ve es adulta y eso es un valor agregado del programa”.

En esa misma línea destaca que como programa, Mentiras Verdaderas siempre quiso tratar al público como adulto y no presentarles un contenido para decirles “lo que es bueno y lo que es malo”.

“A mí, personalmente, me cargaba que hicieran eso conmigo, ¿por qué nosotros íbamos a hacer lo mismo? Eso también ha influido, nosotros presentamos a las personas, pero la gente tiene la última palabra, la última decisión. Yo no soy juez ni la guillotina”, sostuvo.

El rol de la TV

Como comunicador, Eduardo Fuentes también entregó su propia visión respecto al rol que ha cumplido la televisión, y los medios en particular, durante estos tiempos de crisis. Aún así, advirtió que “es difícil hablar de la soga en la casa de los ahorcados porque nos involucra a todos y yo creo que todos nos vamos a equivocar, nos hemos equivocado y hemos acertado. Esto es válido para los medios y para quienes tenemos un micrófono”.

Sin embargo, el animador apuesta por “la genuina propuesta de cada medio donde tratan de hacer, desde su perspectiva, lo que es adecuado para el público que los ve”.

“Desde ese punto de vista, lo que más me duele, que leí mucho después del editorial que hice sobre clase media, mucha gente planteaba, me planteaba o nos plantea, que se sienten desamparados o abandonados en general por los medios. Yo sé que eso puede ser una caricatura o una generalización, pero es doloroso que haya una generalización así porque yo amo mi trabajo, amo los medios, amo lo que se puede hacer a través de la radio, la televisión, la prensa escrita, los medios digitales, etc”, expuso.

“Entonces qué pena que la gente sienta que los medios los han tenido un poco desamparados. Esa percepción de la gente, que podrá o no ser real, me resulta doloroso y creo que tenemos que mirarnos, una vez más, los medios hacia adentro y ver qué estamos haciendo bien y dónde nos estamos equivocando”, manifestó.

Sobre esto, el animador reveló que para ese día no tenían planteado realizar un editorial, pero fue en reunión de pauta con el productor del Mentiras Verdaderas, Mauro Parra, que decidieron hacerlo.

“La verdad es que ni el equipo de producción sabía lo que yo iba a decir, ni yo tenía muy claro lo que quería decir, sabía lo que sentía pero no sabía cómo lo iba a expresar. Prueba de ello es que no fue corto, fueron 18 minutos donde la dirección del programa tuvo la delicadeza de dejarme que corriera, no me apuraron y yo pude sentir y decir desde la guata, del corazón, lo que estaba sintiendo y lo que estaba viendo en la gente”, confesó.

Agradeció, además, que cada cierto tiempo se dan el “gustito” de realizar este tipo de intervenciones, donde “yo me lanzo no más, nadie me la edita, nadie me la revisa, no hay que avisarle a los gerentes ni al director ejecutivo. Yo no llamo a Victor Gutiérrez para decirle que voy a hacer una editorial”.

Matus y Neme

Además del enfoque que ha tenido el programa en los últimos meses, Eduardo Fuentes también atribuye el alza de sintonía del Mentiras Verdaderas a la llegada de los periodistas Alejandra Matus y José Antonio Neme como panelistas estables.

“Para mí, en lo personal, cuando estuvo la posibilidad de que ellos trabajaran con nosotros, yo consideré que era una muy buena noticia. Para nadie es un misterio las credenciales que tienen Alejandra Matus y José Antonio Neme, prueba de ello es que cada una de las intervenciones que han tenido en el programa son notables”, sostuvo sobre esta dupla.

El comunicador recalca que en el programa “hay espacio para todos” y descartó que el arribo de ellos lo opacara en su rol de animador, puesto que lo más importante aquí es la marca Mentiras Verdaderas y el contenido que recibirán los televidentes.

“Tienes un buen equipo que está funcionando y de pronto tienes dos jugadorazos de la primera división europea, y uno dice bienvenido sea. Y que tengan el espacio y el tiempo para que hagan lo que saben hacer, porque le ayuda no solo a la marca, a la sintonía, a las finanzas del canal, sino que también le ayuda a la gente”, sostuvo.

El caso Viñuela

Además del alza que han registrado con el Mentiras Verdaderas y todo lo que eso rodea, Eduardo Fuentes tampoco quedó ajeno a la polémica en la que se ha visto envuelto en los últimos días José Miguel Viñuela. El animador de Mega el pasado jueves protagonizó un repudiable episodio en el Mucho Gusto al cortar el pelo de un camarógrafo en vivo. Su actuación le valió la salida del matinal y más de dos mil denuncias en el CNTV hasta la fecha.

Sobre lo ocurrido, el animador de La Red indicó que es “una lástima. Conozco a José Miguel, tengo la mejor opinión de él, no creo que sea una persona mal intencionada, pero sí creo que se equivocó profundamente. No olfateó ni leyó bien el momento en el que estamos viviendo y no sé qué habrá pasado desde el switch o la producción, si alguien le dijo ‘detente’ y no escuchó”.

En ese sentido, planteó que “yo funciono así siempre y se lo digo al equipo, la última línea editorial siempre voy a ser yo. Aunque me digan ‘pregunta esto’, sino está de acuerdo con lo que yo quiero, no lo voy a preguntar o si me dicen ‘haz esto’ y no quiero, no lo voy a hacer. Entonces, desconozco eso, pero evidentemente es un error grave que ha tenido consecuencias”.

“Como te digo, conozco a José Miguel y tengo una muy buena impresión de él. Lo lamento por el camarógrafo, lo lamento por el equipo de ese programa porque los ponen en entredicho. Es como la tormenta perfecta y vuelvo a algo: todos nos equivocamos. Yo me he equivocado mil veces y probablamente nos vamos a seguir equivocando porque somos seres humanos”, insistió.

Por último, recalcó que “tenemos que aprender, el gran error es cuando lo hacemos una y lo hacemos otra vez. De cada caída saber por qué nos caímos y tratar de no volver a caernos por lo mismo, porque ahí ya no es un error, es una brutalidad”.