Asesora estrella de Donald Trump deja su cargo por complicaciones familiares
Kellyanne Conway dimitió a su puesto en la Casa Blanca para concentrarse en su entorno. Su esposo es un republicano opositor al presidente.
Kellyanne Conway, una de las asesoras estrellas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, renunció a su cargo en la Casa Blanca debido a las complicaciones familiares que estaba trayendo la disputa presidencial de este año.
La colaboradora del mandatario, quien lo acompañó en su elección de 2016, afirmó que abandonará el gobierno a finales de este mes para concentrarse en su entorno.
La gran dificultad que ha vivido Conway para seguir al lado del controvertido gobernante es la postura de su esposo, George Conway, quien fundó Proyecto Lincoln, un grupo de republicanos contrarios a Trump. Él también decidió dejar su puesto en la agrupación, que apoya la candidatura presidencial del demócrata Joe Biden.
“No estamos de acuerdo en muchas cosas, pero estamos unidos en lo que más importa: los niños. Nuestros cuatro hijos son adolescentes y preadolescentes que comienzan un nuevo año académico, en la escuela media y secundaria, de forma remota desde casa durante al menos unos meses. Como millones de padres saben, en todo el país, el hecho de que los niños deban ‘ir a la escuela desde casa’ requiere un nivel de atención y vigilancia”, afirmó la ahora ex asesora de Trump.
La presión familiar sobre la familia de la funcionaria se vio reflejada en un tuit que lanzó Claudia, la hija del matrimonio, quien aseguró haber sido víctima de abuso infantil.
“El trabajo de mi madre arruinó mi vida para empezar. Desgarrador que ella continúe por ese camino después de años de ver sufrir a sus hijos. Egoísta. Se trata de dinero y fama, damas y caballeros”, señaló.
La salida de Conway ocurre horas antes de la Convención Republicana que va a designar al mandatario para la reelección. El listado de oradores al evento político ha llamado la atención, ya que la mayoría corresponde a integrantes de la familia del presidente y no a dirigentes republicanos.