Juan Grabois, el dirigente social y amigo del Papa, que tiene de cabeza al gobierno argentino 

Juan Grabois es un dirigente peronista, fundador del Movimiento Social de Trabajadores Excluidos (MTE) y líder del Proyecto Artigas, organización que “lucha por la dignidad de los descartados por el sistema capitalista” y que por estas semanas ha tenido de cabeza al gobierno argentino.

“En Argentina y América Latina, los pobres tienen un solo modo de acceso a la tierra, que es la ocupación. Hay una sola salida posible y justa a esta crisis habitacional que es garantizar un lote para cada familia”, sentenció el dirigente en conversación con Perfil.

Grabois ha sido el cabecilla de una pugna jurídica y social que puso en la palestra mediática la usurpación de tierras en el país vecino.

“No vamos a negarlo, hemos sufrimos una derrota. Una derrota que nos duele y nos entristece”, afirmó luego que la justicia trasandina lo obligara a retirarse de los predios que se había tomado ilegalmente junto a integrantes del Proyecto Artigas en la estancia Casa Nueva perteneciente a la familia Etchevehere.

Conflicto entre los Etchevehere

La familia del ex ministro de Agricultura, Luis Etchevehere, está enfrentada por la titularidad de un campo, llamado Casa Nueva, en la provincia de Entre Ríos. En el medio, apareció la organización del Proyecto Artigas que Juan Grabois encabeza.

Dolores Etchevehere, una de las herederas del terreno, denunció que recibió solo 300 hectáreas en una sucesión. La división llevó a la única mujer de los hermanos Etchevehere a presentar una denuncia penal por “administración infiel” de los bienes heredados ante la justicia local.

El conflicto escaló a tal punto que, hace dos semanas, Dolores Etchevehere ocupó junto a Juan Grabois y otros integrantes del Proyecto Artigas el campo Casa Nueva. Sin embargo, la madre y los hermanos de Dolores Etchevehere sostienen que ella cedió los terrenos sobre los que ahora reclama titularidad y en los que integrantes del Proyecto Artigas vivían y desarrollaban actividad agropecuarias.

Fue tanta la presión que el día jueves, y tras un fallo judicial, los militantes del Proyecto Artigas fueron desalojados y Dolores Etchevehere fue detenida.

“El clan Etchevhere dio una clase magistral de poder imponiéndose a un Estado pusilánime que nunca se les anima a las élites, pero que no duda en reprimir a los pobres. No fue casualidad que se haya realizado de manera intempestiva un desalojo violento sobre las tierras”, criticó Grabois tras el desalojo.

Asimismo, el dirigente social catalogó a los hermanos Etchevehere como “corruptos” en reiteradas oportunidades y dijo que la decisión judicial les dolió porque “el pueblo pobre esperaba que una vez la tortilla se dé vuelta y los poderosos vean un límite institucional a sus privilegios ilegítimos”.

Los integrantes del Proyecto Artigas se retiraron del predio como se informó oportunamente. Dolores, lamentablemente, fue detenida por la policía de Entre Ríos al servicio de los Etchevehere corruptos. Todavía no informan a los abogados a qué dependencia la trasladan.

— Juan Grabois (@JuanGrabois) October 29, 2020

El Proyecto Artigas

Según define Juan Grabois, el Proyecto Artigas es “una red integrada por movimientos sociales que, movilizados por la búsqueda la justicia y el bien común, actúa en aquellas causas donde se vulneran los derechos de la tierra que están corrompidas por los privilegios de quienes usan el poder en su provecho, en un sistema estructuralmente perverso”.

“Un grupo de campesinos sin tierra, militantes y organizaciones ambientales hemos decidido acompañar a Dolores Etchevehere en la recuperación de la Estancia Casa Nueva”, señala el sitio web de la organización. “Hemos acordado con ella la cesión del 40% de la tierra que le corresponde como legítima heredera de su padre para construir un modelo agrario sostenible, libre de agrotóxicos y explotación, distinto al que su familia representa”, agrega.

Sin embargo, la justicia dijo lo contrario y debieron ser desalojados.

“Retirarnos del campo tiene por objeto mostrar que no somos como ellos. Hemos perdido una batalla, una batalla en la larga lucha por la justicia social”, sostuvo Grabois cuando fue desalojado de la estancia.

“Nuestra vida está consagrada a la causa del pueblo pobre y trabajador. A que los derechos sagrados de tierra, techo y trabajo se cumplan”, agregó.

Qué dice Alberto Fernández

A través de una carta pública, Grabois reclamó: “Al presidente Fernández, al gobernador Gustavo Bordet, al gobernador Axel Kicillof, a los poderes institucionales de la democracia, les pedimos que dejen de ceder ante el poder fáctico”.

Lejos de polemizar, el presidente de Argentina, Alberto Fernández elogió algunas de las iniciativas que impulsa Juan Grabois para poblar zonas rurales, aunque advirtió que “el método no es ocupar campos”.

“Ideas como sacar a la gente de los centros urbanos donde viven hacinadas, llevarlas al campo y en malas condiciones y llevarlas al campo para que puedan desarrollarse cultivando la tierra, produciendo, haciendo una producción ecológica, de verduras, de alimentos, me parece que es muy valioso y la verdad que deberíamos promoverlo eso y deberíamos trabajar mucho más en eso”, planteó el mandatario en declaraciones a Radio 10.

Sin embargo, aclaró que “el método no es ocupar campos”. “Eso lo tengo claro y también lo tiene claro Grabois porque la verdad que él estaba recibiendo un campo de alguien que se lo cedía, tampoco lo estaba ocupando. Pero evidentemente ahí hay un conflicto familiar”, dijo en referencia a los Etchevehere.

“Efectivamente hay muchas tierras del Estado nacional, de las provincias, que nosotros deberíamos pensar en permitir que se le entreguen a quienes quieran realmente producirlas. Yo estoy muy decidido a apoyar todo eso donde hay una vocación social a volver a lo ecológico, a la producción donde no hay riesgo de contaminantes. La verdad que en esos términos es muy importante que podamos trabajar y podemos hacerlo”, dijo Fernández.

Amigo del Papa Francisco

Según la prensa argentina, Juan Grabois habría entablado relación con el Papa Francisco luego que el dirigente social fundara el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y cuando Jorge Bergoglio era todavía arzobispo de Buenos Aires.

En 2007, Grabois envió una carta al sacerdote invitándolo a un evento llamado “Por una sociedad sin esclavos ni excluidos” y aunque Bergoglio no pudo asistir, sí le respondió: “No puedo ir, pero vení a verme”.

“Hubo buen feeling desde el primer encuentro, y a partir de ahí las reuniones se empezaron a repetir. Cuando Bergoglio ascendió a Francisco, la relación entre ambos se volvió una leyenda de la política. Un mito que, sin buscarlo, Grabois alimenta al mantener una reserva extrema sobre el contenido de sus charlas”, publicó la revista Anfibia.

Sin embargo, esta cercanía que dicen algunos que hay entre Grabois y el Papa Francisco ha obligado a que más de un obispo tenga que salir a aclarar que el Papa no apoya las usurpaciones de tierras.

El arzobispo de La Plata, Víctor Manuel Fernández, dijo recientemente que “Jorge Bergoglio no está a favor de las tomas de tierras y reconoce la propiedad privada”.

El periodista argentino Sergio Rubin señaló en TN que “muchos consideran que el Papa debería salir a aclarar que lo que dice y hace Grabois corre por su cuenta. Pero cualquiera observador vaticano sabe que un pontífice nunca haría una cosa así, sencillamente porque no es propio de su investidura. Un pontífice, en todo caso, lo que hace es referirse a una problemática, no a personas con nombre y apellido, ni menos sobre la postura de Francisco frente a la propiedad privada”.

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— Vatican News (@vaticannews_es) October 26, 2020