“Todos ocurrieron bajo mi supervisión”: Donald Trump se atribuyó los avances de las vacunas contra el coronavirus
El actual presidente de Estados Unidos resaltó su rol en los proyectos de Moderna y Pfizer, mientras que el mandatario electo, Joe Biden, agradeció a los expertos que impulsaron las iniciativas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se atribuyó los importantes avances de las vacunas contra el coronavirus que son desarrolladas en su país, las que tuvieron un nuevo capítulo luego que el Laboratorio Moderna asegurara que su proyecto había demostrado una eficacia del 94,5% en su fase III de ensayos clínicos.
En su cuenta de Twitter el republicano resaltó que el anuncio de esta compañía se sumó al entregado hace una semana por la farmacéutica Pfizer, que señaló que su inyección tuvo un 90% de eficacia en sus pruebas en humanos.
“Se acaba de anunciar otra vacuna. Esta vez por Moderna, 95% efectiva. Para esos grandes ‘historiadores’, recuerden que estos grandes descubrimientos, que pondrán fin a la plaga de China, ¡todos tuvieron lugar bajo mi supervisión!”, expresó el gobernante.
Lo cierto es que de los dos proyectos, solo el de Moderna tuvo un aporte financiero de parte del gobierno federal. De hecho la iniciativa estuvo dirigida por el asesor de la Casa Blanca, Anthony Fauci, quien se ha enfrentado constantemente con el mandatario por su gestión de la pandemia.
Una visión radicalmente opuesta a la de Trump fue la que mostró el presidente electo Joe Biden, quien destacó el trabajo de todos los expertos detrás de las vacunas producidas en Norteamérica.
“Una vez más, felicito a las mujeres y hombres brillantes que produjeron este avance y nos han acercado un paso más a vencer este virus. También estoy agradecido por los trabajadores de primera línea que todavía se enfrentan al virus durante todo el día”, señaló en su cuenta de Twitter.
El demócrata enfatizó que los anuncios de las farmacéuticas no implican un abandono de las medidas preventivas como el uso de mascarillas y el distanciamiento físico.
Estados Unidos es el país más afectado con el COVID-19, con 11.048.174 de contagiados y 246.255 fallecidos. Durante las últimas semanas la nación ha sumado más de 100 mil casos nuevos por día, en una curva que sigue en crecimiento en varios estados.