Cambio de hora: el ahorro equivale a casi dos veces la potencia del complejo Alto Maipo
Estudio en el que se basó el Ministerio de Energía determina que la zona central será la que más economizará.
El estudio Efecto en el Consumo de Energía Eléctrica del Cambio de Horario en Chile, realizado por el Programa de Estudios e Investigaciones en Energía del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, realizado en 2009, determinó que la capacidad instalada que ahorrará el país al mantener el horario de verano durante todo el año, equivale a 1.026 MW. Esto corresponde a dos veces Alto Maipo o a un poco menos de la mitad de HidroAysén.
Desde esa fecha se comenzó a analizar la posibilidad de alargar el horario de verano, que anteriormente se mantenía entre octubre y marzo. Con respecto a este documento, el gobierno de Sebastián Piñera determinó alargar el horario hasta mediados de año, pero no mantenerlo durante los 12 meses cómo había propuesto el estudio.
“Sin considerar posibles efectos positivos que esta modificación propuesta tendría en los sectores comercial y público, sólo en el sector residencial, ambas soluciones por igual, tendrían un ahorro de 4,4% mensual en promedio, pudiendo aumentar a 9,2% mensual en promedio si se considera sólo el sector que consume menos electricidad, que corresponde a la población de menos recursos, con la diferencia entre ambas soluciones en el tiempo de aplicación (y por ende, del ahorro anual alcanzable)”, señala el estudio para validad la opción de mantener el horario de verano durante todo el año.
Tomando en consideración el horario anterior, o sea, sólo entre octubre y marzo, en términos de potencia, el ahorro se estimaba en 66,4 MW para el norte grande, 61,8 MW para el norte chico, 669 MW para la zona central, 274 MW para el sur y 17,5 MW para el extremo sur.
Estas cifras apuntan a un menor consumo eléctrico a nivel domiciliario, ya que en las industrias la variación es casi nula.
Este informe fue tomado en cuenta por el ministerio de Energía. De hecho, la cartera monitoreó en los años posteriores al informe la extensión del horario de verano que ya había tomado la administración anterior.
“Considerando los patrones y usos de electricidad propios de las familias chilenas, la mayor disponibilidad de luz natural genera un ahorro en términos de iluminación artificial en los hogares, el cual no resulta compensado con otros consumos, generando consecuentemente una disminución en el consumo energético de la familia”, explica el Ministerio de Energía.
