Aguas Andinas suma 23 vehículos eléctricos a su flota operativa
La iniciativa, con la que se espera generar menos emisiones y contaminación acústica, se enmarca en el compromiso de la compañía con una economía circular para el desarrollo sostenible.
La empresa de servicios medioambientales, Aguas Andinas, anunció la incorporación de nuevos vehículos operativos eléctricos a su flota actual, lo que permitirá generar menos emisiones y contaminación acústica. De esta manera, se convirtió en la compañía con la flota operativa eléctrica más grande e importante de Chile entre las empresas de servicio, con un total de 23 vehículos dispuestos exclusivamente a seguir mejorando el servicio a los clientes.
Este hito es la primera gran entrega de autos eléctricos operativo al total de Aguas Andinas, que suma más de 350 en todo Santiago. Progresivamente se irán sumando más de este tipo para avanzar a una flota sustentable, con una tecnología más amigable con el entorno. De esta manera, se contribuirá no sólo al cuidado del medioambiente sino también a una mejor calidad de vida de los habitantes de la capital.
El aumento en la flota de vehículos operativos eléctricos permitirá que la compañía reduzca considerablemente los gases de efecto invernadero, además de aportar en la disminución de los contaminantes locales en zonas de alta exposición, y ayudar en la reducción de los niveles de ruido. De esta manera, entregará un servicio sostenible enfocado en el cuidado del medio ambiente, y se posiciona como pionera en la industria sanitaria del país.
“En Aguas Andinas estamos convencidos que el desarrollo sostenible es el único camino posible para Chile. En esa línea, nos enorgullece poder aportar nuestro granito de arena para perfeccionar nuestros servicios de una manera sostenible”, destacó el presidente de la compañía, Guillermo Pickering.
Esta iniciativa se suma al proyecto para abastecer de energía limpia los camiones combinados de Aguas Andinas -que cumplen como función destapar las alcantarillas de la ciudad- los cuales incorporan como combustible el gas que se produce en la Biofactoría Gran Santiago.
“Chile se está convirtiendo en un referente de sustentabilidad y energías limpias, gracias a la apuesta que hemos hecho por la electromovilidad. La flota de 203 buses eléctricos que circula por Santiago, la pronta llegada de más de 200 adicionales y la extensión de otros 300 a regiones muestran que hemos fomentado un cambio cultural que tendrá un efecto en mejores ciudades y un medio ambiente más protegido”, señaló la Ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt.
La incorporación de estos vehículos disminuirá de manera considerable los impactos ambientales de la operación: 284.320,9 kWh al año; 429.074 litros de agua al año; 94.463 kilos de CO2 al año. “La eficiencia energética es parte integral de nuestro negocio, con ella avanzamos en nuestra meta de ser una empresa con cero emisiones y residuos, amigable con el medio ambiente y sustentable en el largo plazo”, agregó el presidente de Aguas Andinas.
Con esta iniciativa de electromovilidad, Aguas Andinas cuenta con el primer proyecto a nivel nacional que considera este número de vehículos para labores netamente operativas entre empresas de servicio, a través de lo cual podrá atender de manera sustentable a las comunas en labores de eficiencia en agua potable y aguas servidas.
“Santiago Merece un 7”
Este proyecto de electromovilidad impulsado por Aguas Andinas, se enmarca en su estrategia corporativa: “Santiago Merece un 7”, plan de largo plazo que, entendiendo el doble rol cliente-ciudadano, se compromete con una economía circular para el desarrollo sostenible de la ciudad de Santiago.
El plan, que fue puesto en marcha en 2016, consta de siete pilares estratégicos que señalan las rutas y desafíos de la compañía en el mediano plazo, con el fin de asegurar la sostenibilidad de sus operaciones. De este modo, todas las inversiones realizadas por la empresa se emplazan bajo una estrategia: lograr un compromiso de desarrollo sostenible.