Proyectan replicar Policlínico de la Mujer con VIH en todo el país

Mejorar la calidad de vida de las mujeres con VIH es el propósito principal de la iniciativa Women for Positive Action, instancia que permitió dar vida en Chile al primer Policlínico de Atención Integral de la Mujer con VIH. Este policlínico está en funcionamiento desde hace dos años en el Hospital San Juan de Dios y es la experiencia piloto que espera poder ser replicada en distintos hospitales públicos a lo largo de todo el país.

“Queremos facilitar y ver si es factible de implementar en los distintos centros, un policlínico de atención integral a la mujer. La idea es que ella no tenga que ir a buscar los anticonceptivos a la atención primaria, pedir consejería para salud reproductiva con el ginecólogo y así, una serie de temas que debe ver en distintos lugares, lo que involucra más tiempo y desgaste para la paciente. La idea es que esté todo en un mismo lugar”, explica la Dra. Patricia Vásquez, Jefa del Servicio de Infectología del Hospital San Juan de Dios.

“El policlínico comenzó a funcionar en junio del 2011. La idea es que las mujeres que tengan pocos recursos y escaso tiempo puedan realizar todo el tratamiento en un solo lugar, de manera integral, preocupándonos por su ámbito de salud sexual y reproductiva”, destaca la psicóloga del Hospital San Juan de Dios, Carolina Giadalah.

La profesional señala que lo más importante para las mujeres que acuden a este policlínico es encontrar un espacio donde la entiendan y la guíen en la superación de su enfermedad.  “De los 2.200 pacientes que se controlan en nuestro policlínico, 312 son mujeres. De ellas, 173 se encuentran actualmente en terapia; 87 están sin tratamiento; 31 dejaron de asistir; 14 fallecieron y 7 fueron trasladadas”, detalla.

A juicio de la Dra. Laura Bahamondes, Infectóloga y Sub-Director Médico del Hospital Lucio Córdova, se hace casi imprescindible contar con un centro multidisciplinario  para que las mujeres accedan a una atención integral. Las doctoras, enfermeras, matronas y psicólogas acompañan a la paciente desde el momento en que se les entrega el diagnóstico y durante el tratamiento que es de por vida. En algunos casos el apoyo psicológico es fundamental para evitar situaciones que pongan en riesgo a la paciente.

“La violencia intrafamiliar es una realidad en varios casos. Violaciones, baja de la autoestima en la mujer, porque piensa que es impura y no es digna de vivir, temor a revelar el diagnóstico a los hijos, son sólo algunos de los problemas que enfrentan las mujeres con VIH, y nuestro desafío es empoderarlas, que se sientan parte de la sociedad, elaborando distintas estrategias para cada paciente”, resalta la Dra. Bahamondes.