Desde España, Jorge Nazar y el clásico que paralizó a todo un país
"Por mucho que a varios de nuestros lectores –quizás con razón- les gustaría ahondar en las bondades del Barcelona, en estas líneas no podrán solazarse. La “manita” culé merece mucho espacio. Más del que puedo entregarle. Prefiero tratar algo que me tiene molesto. Aquí en España los medios deportivos y los periodistas se abanderan con los equipos. No es algo circunstancial, sino que es a veces brutal.
“Por mucho que a varios de nuestros lectores –quizás con razón- les gustaría ahondar en las bondades del Barcelona, en estas líneas no podrán solazarse. La “manita” culé merece mucho espacio. Más del que puedo entregarle. Prefiero tratar algo que me tiene molesto. Aquí en España los medios deportivos y los periodistas se abanderan con los equipos. No es algo circunstancial, sino que es a veces brutal.
Títulos como “Mourinho, leñero profesional” (Mundo Deportivo), “Los más odiados. Clamor general contra Mourinho y Cristiano” (Sport); o frases como la del director del Diario Marca: ”Guardiola, al más puro estilo fascista, me ha puesto en la diana”, son parte ya de la normalidad.
Todo movimiento de fuerzas de Barcelona o Real Madrid es leído como un acto de provocación. Y es multidimensionado por el medio que recoge el guante. La gran mayoría de las tertulias televisivas y radiales (con notables excepciones) lo exacerban hasta el hartazgo.
John Carlin es quizás uno de los periodistas que más respeto. Pero entra en esta órbita pegando a lado y lado, y al sistema en general. Aprovecha su tribuna de El País (un medio nominalmente “no abanderado”) y pega primero porque el Clásico sea en lunes (“España desprecia su sex appeal”). Después, sentencia que la Liga española compite con la escocesa por ser la peor del mundo (“Crónica anunciada de la muerte de la Liga española”). Acomoda datos, hechos y cifras a su conveniencia… Todo, muy rebatible.
En definitiva, entra en el mismo juego que tanto –al parecer- gusta en España. Ahora, seamos justos. Algunos protagonistas no ayudan mucho a apagar el fuego. Y allí la figura de Mourinho es central (el otro día apareció en Mundo Deportivo una caricatura de Moe Sislack -sí, de Los Simpson- dando instrucciones en el camarín del Madrid).
Pero ojo, en el partido no fue él sino Pep Guardiola el que tuvo un altercado al esconderle un balón a Cristiano Ronaldo.Todavía no toco lo que sucedió en el Clásico (con mayúscula, que parece que fuera el único que existe).
Me defraudó. No el local, por supuesto. Pero el partido debe ser lucha de dos, y el Madrid fue un fantasma de lo que muchos (me incluyo) esperábamos. Fue tan evidente la superioridad blaugrana, que sólo se apaciguó por algunos minutos con aquel incidente Guardiola-CR7.
Sin embargo, la sensación se repite. Es tanta la basura que se escribe antes y después, que a veces lucha por empañar un partido donde había 11 campeones del mundo en cancha (y en esa cifra no están ni Messi ni Cristiano Ronaldo). Es verdad, parece que el Barcelona se comió al Real Madrid… Me asusta más que mis colegas se coman el fútbol…”
Jorge Nazar es periodista chileno y comentarista de Gol Televisión España. En twitter es @jorgenazar y escribe semanalmente en El Dínamo.