Aquí las "mejores" frases del fútbol mundial (incluidas las del Murci)

En la cancha se ven los gallos, dicen. Pero lejos de allí, no todos los futbolistas pueden jactarse dominar las entrevistas con la misma facilidad que con el balón. Uno de los más conocidos por sus “perlas” es Francesco Totti, quien frente a un periodista que le dijo “Carpe Diem”, el delantero de la Roma contestó: “lo siento, pero no hablo inglés”.

 

Totti es uno de los mejores, pero no es el único. A continuación, algunas de las frases más cómicas proferidas por futbolistas, evidentemente lejos de su zona cómoda.

 

1.- Mark Viduka, ex delantero del Newcastle: “No me importaría perder todos los partidos, siempre y cuando ganemos la Liga”.

 

2.- Ian Rush, futbolista de Gales, que jugó en la Juventus: “No me gustaba jugar en Italia, era como hacerlo en un país extranjero”.

 

3.- Mark Draper, centrocampista inglés: “Me gustaría jugar en un equipo italiano. Como el Barcelona”.

 

4.- Stan Collymore, delantero inglés: “He remitido al club una solicitud para ser traspasado. Pero déjenme decir que no quiero dejar el Leicester”.

 

5.- Lee Hendrie, ex centrocampista inglés: “Recibí un golpe en mi tobillo izquierdo. Pero algo me dijo que era mi derecho”.

 

6.- Zenga, ex arquero del Inter: “‘Esperemos’ es un adjetivo que no quiero utilizar para hablar de la vuelta de Ronaldo”.

 

7.- Periodista: “Y usted, ¿Cómo lo hace para correr tanto? ¿Cuántos pulmones tiene?”.

– Héctor Puebla, ex futbolista chileno: “Bueno… Uno, como toda la gente ¿no?”.

 

8.- Periodista: “Cuando te fuiste al Milán ¿Te pagaban mucho o poco?”.

– Claudio Borghi, ex futbolista argentino: “No, ni lo uno ni lo otro, sino todo lo contrario”.

 

9.- Periodista: “Tenemos información de que se están haciendo gestiones para que vaya a jugar al extranjero ¿Nos podría decir de dónde lo están pidiendo?”

– Murci Rojas, ex futbolista chileno: “Bueno, del país no puedo contarles nada… Sólo puedo adelantarles que se trata de un equipo brasileño”.

 

10.- Sir David Beckham: “Definitivamente quiero que Brooklyn, mi hijo, sea cristianizado. Pero no sé todavía a qué religión”.

 

Vía La Vanguardia