El por qué Mourinho vetó al “Kun” Agüero
O cambiaba de representante o no fichaba por el Madrid. Así de claro se lo dejó el técnico portugués al delantero argentino, quien no aceptó lo que le pareció un chantaje.
El cuatro de enero el Atlético de Madrid anunció la renovación de Sergio Agüero. Lo que se presentó entonces como un éxito de gestión de Gil y Cerezo no era más que una vía de escape para el jugador, quien logró rebajar su cláusula de rescisión de los 60 a los 45 millones de euros, una cifra que Bruno Satin, director mundial de operaciones de fútbol de la empresa IMG, contemplaba como adecuada para conseguir la salida del `Kun¿ del Manzanares. La empresa que representa los intereses del jugador inició en aquellas fechas un acercamiento al Real Madrid y a finales de abril comenzó a ‘mover’ el fichaje de Agüero, bien visto por Florentino Pérez y por José Mourinho... Quien fue a la postre uno de los dos responsables de que la operación no se llevase a cabo.
La historia del ‘no fichaje’ había arrancado a mediados de noviembre, cuando Diego Armando Maradona (suegro de Agüero) visitó España, acudió a un entrenamiento del Real Madrid y no tuvo inconveniente, sino todo lo contrario, en elogiar encendidamente el trabajo de un Mourinho al que ya insinuó la posibilidad de que su yerno pudiera cambiar de acera. El técnico, que barruntaba el fichaje de un ‘9’ por el mediocre rendimiento de Benzema (dos goles en quince partidos) tomó buena nota del ofrecimiento, aunque lo aparcó con vistas a la siguiente temporada por la imposibilidad de llevar a cabo la operación en un mercado de invierno que llevó al Bernabéu, como cedido, a Adebayor.
Con Agüero plenamente consciente de todo, el asunto se retomó a principios de abril, poco antes del maratón de partidos ante el Barça que debía sentenciar la hegemonía de unos u otros y que acabó con el Madrid ganando la Copa… y arrodillado tanto en la Liga como en la Champions. Fue por aquellos días cuando el entrenador portugués citó al futbolista a un encuentro informal, que en realidad desembocó en una suerte de aviso. Donde Agüero esperaba encontrar a Mourinho, halló también a Jorge Mendes y lo que debía ser una charla futbolística degeneró en un ofrecimiento en toda regla de Gestifute, la empresa de representación del empresario portugués que pretendía hacerse con sus derechos. Éste era el peaje entre el Manzanares y el Bernabéu para el ‘Kun’, quién al rechazar la oferta `comercial¿ descubrió que la puerta del Real Madrid sólo se le abriría a través de Mendes, que se encargó de dejarle muy claro que solamente él podría concretar el fichaje.