Los riesgos que enfrenta Arturo Vidal después del choque en estado de ebriedad en plena Copa América
El volante chileno debe hacer frente a dos ámbitos: el judicial y el deportivo/profesional.
Hace tan sólo unos días se hablaba que Vidal estaba “85% fuera del club (Juventus)”, ya que existe interés por el Arsenal -aunque esto fue negado por el DT Arsene Wenger- el Real Madrid y el Manchester United por el “Rey Arturo”, según publicaba As.
Pero ese “existe” podría pasar a conjugarse en pasado a causa del feroz choque que experimentó anoche el futbolista, el cual provocará que el jugador sea formalizado por “conducción en estado de ebriedad” después de que se registraran 1,21 gramos de alcohol por litro de sangre tras el accidente.
El precio que pedía la “Vecchia Signora” por el pase de Vidal oscilaba entre los 40 y los 30 millones de euros.
Su panorama ahora se torna incierto. La prensa italiana lo primero que aseveró es que esta situación podría haber dado paso a una eventual desvinculación del chileno en la Juventus.
Y si el escenario internacional no fuese lo suficientemente complejo, aún el DT Jorge Sampaoli debe determinar si es que Vidal juega o no este viernes ante Bolivia.
Si bien la postura del argentino, y de la mayoría del plantel, apostaría a que éste siga jugando sin cambios en esta Copa América, se estaría barajando sacarlo de la nómina para enfrentar al equipo trasandino.
No obstante el reglamento de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) es más rígido, ya que en su artículo 19 BIS del código de penalidades plantea que “los integrantes de una delegación de la Selección Chilena de Fútbol deberán observar en todo momento; esto es, antes, durante y después del o los partidos en que participen una conducta acorde con el hecho de estar actuando en representación del país, ajustándose a las normas de decoro, buenas costumbres y disciplina que tal calidad exige”.
En caso contrario, se debe denunciar al Tribunal de Disciplina por el directorio de la ANFP. Cabe recordar, por ejemplo, para el “Bautizazo” -donde Vidal estuvo presente-, la sanción correspondió a 10 partidos de castigo a cada uno de los involucrados.
En tanto en el ámbito penal, la “Ley Emilia” endureció las penas para delitos relacionados con accidentes de tránsito, donde existiera influencia del alcohol o conducción bajo estado de ebriedad. Si presenta más de 0,8 gramos de alcohol por litro de sangre (Vidal tenía 1,21), por un accidente sin daño ni lesiones arriesga presidio entre 541 días y 3 años. En caso de causar lesiones gravísimas, la pena se eleva entre 3 años y un día a 5 años, por lo menos con un año de presidio efectivo.