Bianchi barrió con el fútbol chileno por desafiliación de Deportes Concepción

Durante esta semana, el consejo de presidentes de la Asociación Nacional de Fútbol acordó desafiliar a Deportes Concepción, a raíz de las distintas irregularidades que se vivían dentro del cuadro lila, lo que provocó la ira de los hinchas quienes, incluso, llegaron hasta Quilín en protesta por esta situación.

Quien se sumó a las críticas surgidas tras la decisión fue Felipe Bianchi, quien a través de una columna publicada hoy en el diario La Tercera, criticó el mal manejo de la ley de Sociedades Anónimas que buscaba pagar los sueldos como se debía, “sería imposible dejar de pagar las imposiciones”, y “los malos dirigentes serían por fin responsables de sus errores o delitos”.

El periodista deportivo se mostró completamente indignado con que, hasta el momento, ningún dirigente ha enfrentado a la justicia por las múltiples irregularidades que han ensuciado el deporte más popular de nuestro país. Incluso, se aventuró en señalar que “no sería raro que tarde o temprano vuelvan Jadue, Jaque, Segovia y los demás. Y capaz que los reciban con los brazos abiertos cuando el tiempo haya borrado la memoria”.

En ese sentido, mencionó el caso de Deportes Concepción, el que “en plena ley de sociedades anónimas llegó un grupo de cortabolsas, bandoleros y manilargos que, como en los viejos tiempos, se apropió del pasado, de la fama, del cariño y de la historia del club…y no puso nada a cambio”.

“Cuando volvimos a mirar, se habían escapado llevándose todo. Incluyendo los millones de pesos no invertidos por ellos, desde luego, sino recibidos desde el CDF por ser parte de la familia. ¿Solución? Se desafilia al club. Pero no se dan los nombres de los culpables, ni se los persigue judicialmente. Una vez más nadie responde, nadie paga, como nadie pagó por la quiebra de Colo Colo, de la U y de tantos otros”, sostuvo.

“¿Ése era el sentido de la ley? Claro que no. Pero no es sólo un problema del texto legal, que desde luego habrá que revisar por enésima vez. Es un problema de voluntad, de intención, de valentía entre quienes tienen que aplicarla (algo bastante parecido al tema de la seguridad al interior de los estadios). Con el caso de Concepción ha vuelto a quedar claro que esa voluntad de castigo no existe”, agregó.

A raíz de esto, publicó, “los fulleros y estafadores se siguen paseando por Quilín hasta que se cansan de de timar, y luego escapan sin que nadie haga nada. Los únicos que sufren son los hinchas, los socios, los jugadores y la historia, que ve desaparecer a sus protagonistas. En ese sentido, al menos, nada ha cambiado y se ha llevado a cabo un engaño fenomenal a la credibilidad pública y a las normas vigentes”.

De esta manera se preguntó: “¿No será hora que intervenga por fin alguna institución externa? ¿Cómo nadie va a poder hacer nada? Si ésta va a ser otra ANFP inactiva, cobarde y cómplice, ¿al Congreso y al gobierno también les dará lo mismo? ¿Así de simple es saltarse las leyes en Chile? ¿Así de fácil es hacerle daño a una ciudad y luego escapar?”.

Sin embargo, existe una excepción a la regla. Bianchi quiso también recalcar que el caso de O’Higgins es el mejor ejemplo para dar cuenta que la ley sí funciona: “Tras el cambio de sistema se recuperó a un club quebrado, se ha invertido muchísimo en infraestructura y se pelea el título todos los años. Bonito ejemplo de que, si se usaba bien la ley, se podía mejorar”.