Beccacece busca fichar a uno de los jugadores con más actos de indisciplina del continente
La Universidad de Chile ya piensa en refuerzos, pero si la intención era calmar el camarín… se complica un poco.
No hay dudas. Paolo Guerrero es uno de los mejores jugadores que ha entregado el fútbol peruano. Sin ir más lejos, el atacante fue, junto a Eduardo Vargas, el máximo artillero de la pasada Copa América disputada en nuestro país, ambos con 4 anotaciones.
Por eso cualquier técnico quisiera contar con sus servicios. Sebastián Beccacece es uno de ellos. Según publica ESPN, el actual atacante del Flamengo está siendo seguido muy de cerca por los agentes de la Universidad de Chile, instruidos por el ex ayudante de Sampaoli.
La idea del cuestionado adiestrador azul es encontrar un reemplazante de fuste para Gustavo Canales, de irregular presente en la institución. El único problema es que Guerrero es el niño símbolo de la indisciplina en Perú, tanto dentro como fuera de la cancha. Un problema gratis, tomando en cuenta que el camarín del Bulla no está en calma.
Es cosa de hacer un pequeño recuento. Guerrero se fue del Hamburgo, entre muchas razones, por sus reiterados actos de indisciplina. Todos recordarán la violenta entrada a Sven Ulreich en el partido ante Stuttgart:
También podemos recordar cuando le tiró un botellazo a un hincha rival, mientras caminaba a los vestuarios:
Cómo olvidar cuando su madre y la policía alemana tuvieron que separarlo para que no se fuera a las manos con un hincha del Bremen en la calle:
¿Se acuerdan cuando escupió a un hincha y lo invitó a bajar para pelear? “Conchetumadre, baja y nos agarramos tú y yo”, le dijo frente a las cámaras.
En Brasil también sumó expulsiones. En el país de la samba sorprendió con un nuevo incidente en el que golpeó con la cabeza a un jugador del Gremio.