Increíble fallo de Diego Valdés marcó amargo empate entre la Roja y Corea del Sur
Cuando se jugaban los descuentos, específicamente en la última jugada del partido, el seleccionado tuvo el partido en sus botas con la ocasión más clara del encuentro.
En un partido intenso, esta mañana la Roja de Reinaldo Rueda consiguió un amargo empate ante la selección de Corea del Sur, en amistoso disputado en Suwon como parte de la accidentada fecha FIFA del equipo nacional, que sólo disputó un encuentro luego de la suspensión del duelo con Japón.
El cruce tuvo nervio de inicio, con los asiáticos bien compactados y dinámicos en la presión en el último tercio, ansiando propinar un zarpazo con cada balón perdido por los chilenos en las zonas más calientes del campo.
Tiene Paulo Bento jugadores para capitalizar esta forma de afrontar los partidos contra escuadras que, como la Roja, discurren principalmente a partir de la posesión.
Es el caso de Hwan hee-chan o Song Heung-min, capaces de aportar desborde y electricidad según enfilan el área.
Sin embargo, contra el equipo de todos, a Corea del Sur pareció faltarle de nuevo un “nueve” capaz de coronar con goles los espacios que le generan sus volantes.
Como ya sucediera contra Costa Rica el pasado viernes, ni Hwang Ui-jo ni Ji Dong-won lograron poner el punto final necesario.
Y así, fue en realidad el equipo de Rueda el que dio más sensación de peligro.
El equipo nacional destacó por su buen trato a la pelota y jugadores como Vidal o Aránguiz siguen simbolizando la era más exitosa de esta selección, que suma ahora a nuevas figuras como Diego Valdés o Ángelo Sagal, el primero en probar al meta asiático con un zapatazo lejano.
Además de acusar la falta de Alexis Sánchez, Chile pecó también de impreciso cuando más daño pudo hacer.
Claro ejemplo fue una de las ocasiones más claras, en la que Vidal, tras una jugada trabada pero muy bien construida, no logró un buen contacto de volea a escasos dos metros de la línea de gol.
La jugada increíble
Cuando se jugaban los descuentos, específicamente en la última jugada del partido, Valdés tuvo el partido en sus botas con la ocasión más clara del encuentro.
Sin embargo, con el meta surcoreano ya vencido en el suelo, su tiro se fue altísimo. Para no creer.