La lucha del fútbol femenino por conseguir un seguro para sus lesiones
El caso de la jugadora de la UC Consuelo Martin abrió el debate sobre la igualdad de condiciones en comparación al fútbol masculino. Recién en mayo se concretó la póliza que protege a las jugadoras ante lesiones.
El fútbol femenino ha logrado visibilidad debido a la destacada participación de Chile en el Mundial de Francia y los atractivos encuentros del campeonato de Primera División. Sin embargo, la lucha por lograr emparejar la cancha frente a los hombres aún se mantiene en aspectos básicos como el tratamiento de las lesiones.
Este tema quedó expuesto luego que se conociera la situación de la jugadora de Universidad Católica Consuelo Martin, quien hace tres semanas se rompió los meniscos y cortó los ligamentos de su rodilla.
El hecho generó reclamos e inmediatas comparaciones con el caso de Francisco ‘Gato’ Silva, quien fue operado inmediatamente luego de su fractura de tibia y peroné. Desde Cruzados SADP afirmaron que el problema de la futbolista requería un tiempo de preoperatorio, asegurando que ellos atendían por igual a la rama masculina como a la femenina.
De todos modos, el tema ya estaba instalado y dejaba múltiples dudas sobre las condiciones en las que las futbolistas deben enfrentar sus lesiones deportivas.
La arquera que se pagó su operación
Karen Frez durante el tratamiento de su lesión.
En abril de este año se conoció el dramático caso de la arquera de Unión La Calera Karen Frez, quien pagó de su bolsillo una costosa operación para tratar una lesión de la rótula y los meniscos.
“Me lesioné en agosto del año pasado en un partido con Audax Italiano, pero solo en octubre supe con certeza el diagnóstico. De un esguince del ligamento medial de la rodilla derecha, que había tratado con sesiones de kinesiología, una resonancia arrojó que tenía rotura de ligamento y meniscos“, expresó la futbolista a La Estrella de Valparaíso.
La portera agregó que el equipo ‘cementero’ no la respaldó, ya que solo presta su nombre para competir en la segunda división femenina. También aseguró que debido a su operación tuvo que tomar un préstamo de una caja de compensación, el que le tomaría pagar por dos años.
En ese momento, solo 8 de los 22 equipos tenían la póliza de cobertura ofrecida por la ANFP.
El histórico seguro universal
Recién en mayo de este año, la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (ANJUFF) anunció la oficialización por parte de la ANFP de un proyecto de seguro médico universal para todas las jugadoras de la categoría adulta de Primera y Segunda División del Campeonato Nacional.
Aquel avance, que se trabajó desde noviembre de 2018, derivó en una póliza que respaldaría a las jugadoras ante diversos problemas de salud que pasaran y que se vincularan con la actividad futbolística profesional.
Tess Strellnauer, presidenta de ANJUFF explicó a EL DÍNAMO que el seguro universal se aplica a unas 650 jugadoras, quienes hasta antes de este convenio no tenían cobertura para sus lesiones “tanto grande como las chicas”. Actualmente, se aplica en todos los clubes que hasta antes de su firma no tenían ningún tipo de respaldo para sus futbolistas.
“El seguro sí está funcionando. Obviamente, como cualquier proceso burocrático, hay diferencias en todos los centros en lo que uno puede asistir acá en Santiago y en regiones, pero ha funcionado súper bien”, expresó.
La dirigenta reconoció que lograr el seguro con la ANFP fue algo “complejo”, pero que el cierre del convenio dejó satisfechas a ambas partes. También recordó el caso de Frez, señalando que “lastimosamente cuando se firmó el seguro, de mayo para adelante, empezó a correr, y ella se lesionó el año pasado”.
Sobre lo ocurrido con Consuelo Martin -quien finalmente se operó durante este miércoles– y el debate generado por las condiciones de trabajo del fútbol femenino frente al masculino, Strellnauer expresó que “lo más importante es que el club se haga cargo, independiente si hay seguros o no, el que igual sigue siendo una solución provisoria porque los clubes no lo tienen muy interiorizado”.
“El tema es que (los equipos) deben hacerse cargo de las categorías femeninas, y que finalmente se trata de una jugadora de su institución, y que por representarla tuvo algún tipo de accidente. Hay que valorar el hecho de que se están representando sus colores”, cerró.
