“Guardia Robocop”: el origen de la fuerza de seguridad que resguarda los partidos en el Estadio Nacional
Los efectivos privados entrenan junto con FFEE de Carabineros e inicialmente fueron contactados por la ANFP para los duelos de liguilla y Copa Chile.
Tras los llamados a boicotear el desarrollo del fútbol chileno luego del estallido social, los dirigentes debieron reforzar la seguridad con una singular fuerza conocida como “guardia Robocop”, la que se ha hecho cada vez más frecuente durante los últimos partidos que se han disputado en el Estadio Nacional.
Su presencia se hizo notoria el sábado pasado, cuando los hinchas de Universidad de Chile intentaron interrumpir el encuentro de su equipo ante Curicó Unido en protesta por la muerte de Jorge Mora, el hincha de Colo Colo que fue atropellado por un carabinero hace una semana.
Los efectivos, que están vestidos completamente de negro, fueron confundidos con personal policial, ya que llevaban un uniforme similar con escudos y cascos especiales para enfrentar los disturbios. Lo cierto es que se trata de un grupo privado, especialmente entrenado para reforzar la seguridad al interior del campo de juego.
La empresa
La “guardia Robocop” junto con Carabineros. (Agencia Uno)
La llamada “guardia Robocop” -conocida de esa forma por la similitud con los uniformes que aparecían en la recordada película- corresponde a un equipo de guardias pertenecientes a la empresa MMC Seguridad, con sede en Rancagua.
Definida como una “empresa familiar” en su página web, los dueños de MMC Seguridad son el matrimonio conformado por Mario Muñoz Catalán y Mónica Cerda Olivares, quienes aparecen como gerentes y socios.
Junto a ellos, Mario Muñoz Cerda ocupa el cargo de jefe de operaciones, y Pablo Muñoz Cerda, quien aparece como Jefe de Seguridad OS-10.
La Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) solicitó sus servicios para los encuentros de la liguilla de ascenso a Primera B y para los partidos de Copa Chile que se jugaron en Temuco. Para el encuentro de Universidad de Chile ante Curicó fueron contratados por el propio elenco laico. Una fuente de Quilín señaló a EL DÍNAMO que “los costos asociados a este ítem son confidenciales”.
Mario Muñoz, jefe de operaciones de la empresa, señaló a La Segunda que los guardias de seguridad están acreditados con el curso OS-10 de Carabineros de Chile, con orientación al resguardo del orden público. También confirmó que entrenan junto con personal de Fuerzas Especiales.
“Eso no lo tienen todos los guardias privados, solo los que forman parte de este grupo de apoyo en los estadios. Además deben cumplir ciertas horas de entrenamiento semanal, no es solo capacitación en esta instancia”, expresó.
Muñoz aclaró además que si bien han contratado a ex uniformados, hay varios integrantes del equipo que son guardias de seguridad certificados, quienes poseen experiencia para enfrentar este tipo de instancias.
El equipamiento
La “guardia Robocop” cuenta con un equipamiento especial, el que busca abordar todas las situaciones que puedan registrarse al interior de los recintos deportivos.
En lo visible, tienen chalecos protectores, bastones antimotines, cascos y un escudo. Su uso está autorizado y todos los integrantes del grupo poseen entrenamiento para su utilización. Eso sí, no tienen considerado el uso de armamento de fuego, ya que aquello no está permitido según el Decreto Supremo N° 93 promulgado por el Ministerio de Defensa.
Otra característica especial de la unidad es que posee zapatos de fútbol, lo que les da más posibilidades a la hora de perseguir a algún intruso que pretenda ingresar a la cancha.
Por el momento no se ha confirmado ni descartado la presencia de la guardia en los partidos de eliminatorias que se desarrollarán a partir de marzo.
