En qué estaba el Campeonato Nacional antes de la pandemia del coronavirus
Elencos como Colo Colo, Universidad Católica y Universidad de Chile enfrentaban distintas realidades antes que se decretara la suspensión de la actividad.
Las autoridades de Gobierno confirmaron que el Campeonato Nacional volverá a disputarse a partir de este 29 de agosto, luego de casi cinco meses de paralización por la pandemia del coronavirus.
En todo este tiempo, el fútbol chileno vivió una de las crisis más profundas de su historia, ya que los clubes dejaron de recibir los ingresos que mensualmente recaudaban por distintas vías. Aquello, por ejemplo, hizo que Colo Colo recurriera a la Ley de Protección al Empleo y rebajara los sueldos de sus jugadores, desatando un profundo quiebre institucional.
Todos estos acontecimientos hicieron olvidar la realidad deportiva que tenían cada una de las 33 instituciones de Primera División y Primera B. Muchos equipos estaban iniciando sus temporadas estableciendo objetivos claros, como la lucha por el título y evitar el descenso.
Estos meses de pausa también hicieron olvidar las complicadas situaciones que se vivieron los dos primeros meses de 2020, donde las canchas fueron escenario de violentos incidentes en medio de un estallido social que seguía vigente.
Los últimos partidos
Temuco y San Marcos de Arica, el penúltimo partido que se jugó antes de la paralización del fútbol. (Foto: Agencia Uno)
El último encuentro oficial que se disputó antes de que se decretaran las cuarentenas en varias comunas del país fue el 17 de marzo pasado. Fue el empate 1-1 de Unión San Felipe ante Deportes Santa Cruz. El tanto que cerró las acciones fue marcado por Julio Castro, jugador del equipo del Valle del Aconcagua.
Aunque oficialmente este fue el encuentro final, el más polémico fue el penúltimo, el que cruzó a Deportes Temuco con San Marcos de Arica por la cuarta fecha de la Primera B en el Estadio Germán Becker.
El duelo fue controversial debido a que en paralelo varios otros partidos se estaban suspendiendo y algunos jugadores solicitaban su cancelación. Además se realizó en una región (La Araucanía) que estaba experimentando una fuerte alza de casos de COVID-19, y que en abril se transformó en una de las más afectadas de todo Chile.
En el Campeonato Nacional (Primera División), el cierre previo antes de la pandemia del coronavirus fue el 15 de marzo y enfrentó a Audax Italiano con la Universidad de Concepción en el Estadio Bicentenario de La Florida.
Otros torneos como la Segunda División Profesional, la Tercera A y la Tercera B no alcanzaron a iniciar sus actividades, quedando en un complicado receso.
Los efectos del estallido social
El ingreso de los hinchas en el encuentro entre Coquimbo Unido y Audax Italiano. (Foto: Agencia Uno)
Antes de la pandemia del coronavirus, el Campeonato Nacional estaba pasando por complicados momentos debido a los efectos del estallido social que aún estaba manifestándose en distintas formas.
La muerte de Jorge Mora, el hincha de Colo Colo que fue atropellado por un carabinero en la salida del Estadio Monumental, agudizó los conflictos al interior de los estadios. En dos oportunidades, estos acontecimientos afectaron directamente al desarrollo de los encuentros deportivos.
El primero ocurrió el 31 de enero, cuando un grupo de barristas de Coquimbo Unido ingresó con un lienzo durante el encuentro ante Audax Italiano. Los serios incidentes ocurrieron cuando solo se habían jugado 16 minutos de encuentro. En el lugar hubo peleas y agresiones a los camarógrafos de CDF. Hasta ahora la ANFP no ha reprogramado el resto del encuentro.
El otro momento complejo se vivió en 16 de febrero, cuando Colo Colo recibió a la Universidad Católica en el Estadio Monumental. Cuando se jugaba el minuto 71, unos individuos de la Garra Blanca lanzaron bengalas hacia la cancha. Una de ellas cayó sobre el jugador albo Nicolás Blandi, quien quedó afectado. El árbitro decidió suspender el encuentro y en Quilín terminaron dándolo por terminado, con una victoria 2-0 para los cruzados.
Uno de los efectos deportivos adicionales que generaron las protestas del Gobierno fue la suspensión del torneo 2019, que hizo que no se ejecutaran los descensos. Aquello estableció un complejo sistema de promedios, el que aún no era bien comprendido por los hinchas antes del cierre por la emergencia sanitaria.
La realidad de los “grandes”
Los jugadores de la UC celebrando un gol ante Cobresal. (Foto: Agencia Uno)
La tabla de posiciones del Campeonato Nacional en la previa de la crisis del coronavirus tenía a Universidad Católica como puntero exclusivo con 19 unidades, a tres puntos de distancia de Unión La Calera y Curicó Unido, sus más cercanos perseguidores.
El elenco dirigido por Ariel Holan venía con dudas, ya que el 10 de marzo perdió como local ante América de Cali por la fase de grupos de Copa Libertadores. Aquello no afectó el gran rendimiento mostrado a nivel local, el que se ratificó el 14 de marzo con la victoria 1-0 sobre Cobresal en El Salvador, el que terminó siendo su último encuentro en casi cinco meses.
Universidad de Chile estaba mostrando una recuperación tras un pésimo 2019 que lo tuvo en posiciones de descenso. Justamente esta es la misión que aún mantiene el elenco dirigido por Hernán Caputto, quien debe sumar la mayor cantidad de puntos para no caer bajo el complejo sistema de coeficiente de rendimiento.
Tras su dolorosa eliminación de Copa Libertadores ante Inter de Porto Alegre, el elenco estudiantil venía mostrando cierta regularidad y varios triunfos al hilo. Aquello se cerró el 5 de marzo, cuando empató 0-0 ante Everton, en un encuentro marcado por el reencuentro con el ex arquero azul, Johnny Herrera. Sin jugar la fecha suspendida por la pandemia, los laicos sumaron 14 unidades.
Colo Colo venía de una crisis muy profunda, la que se reflejó con la partida del entrenador Mario Salas. El equipo terminó en manos de Gualberto Jara, quien pudo subir en algo el nivel de un equipo que estaba bajo las constantes críticas de sus hinchas.
El 11 de marzo, el “Cacique” logró una revitalizadora victoria 1-0 ante Atlético Parananese por la Copa Libertadores. Dos días después lograron vencer 2-1 a Deportes La Serena en el Estadio La Portada. Desde aquel entonces el equipo no volvió a jugar.
En la fotografía del momento, los albos sumaban solo siete puntos (con dos victorias, un empate y cuatro derrotas), ubicándose en un opaco decimotercer lugar.
