Cuatro infografías que explican los problemas clave de la educación chilena, según E2020
Una deserción escolar de 90 mil estudiantes anuales y la matrícula de educación pública más baja de Latinoamérica reflejan el estado de la educación chilena, son algunas de las realidades que reflejan estas infografías preparadas por Educación 2020.
Aún a cinco años de las primeras protestas estudiantiles y a más de dos de que este gobierno prometió que iba a solucionar gran parte de los problemas de la educación chilena, aún hay varias situaciones críticas en el sector educativo que ni siquiera tienen esbozada una posible mejora.
La ONG Educación 2020, que representa a Chile en la Red Latinoamericana de Organizaciones de la Sociedad Civil por la Educación (Reduca), elaboró cuatro infografías que destacan algunas de las cifras y los principales problemas de la educación chilena, y que logran reflejar el estado en la que esta se encuentra.
1.- La importancia la primera infancia
Según Educación 2020, “antes de los cinco años es cuando ocurre la mayor explosión de lenguaje de las personas y un Big Bang de conexiones neuronales. Y sin embargo, este es el ciclo educativo en el que Chile invierte menos recursos”. “Sí, se han construido salas cunas y jardines infantiles, pero con bajos estándares de calidad, especialmente en la proporción entre educadoras por niño y niña. En primera infancia, la educación de mala calidad puede causar más daño que no tenerla”, asegura Nicole Cisternas, investigadora de la ONG.
2.- Una baja matricula en la educación pública
Después de la reforma de los 80′, la matrícula de estudiantes en establecimientos públicos cayó a la mitad. Esto ocurrió por distintos problemas, entre ellos, el sistema de ‘voucher’, que incentiva la competencia de matrícula entre colegios públicos y subvencionados para recibir la subvención estatal”, explica 2020.
“El voucher, a su vez, incentiva la desigualdad al entregar financiamiento variable a colegios con gatos fijos y promueve que la oferta de educación pública varíe entre comunas, dependiendo de la gestión de cada municipio”, agrega. En la Fundación cree que es un imperativo fortalecer este tipo de educación.
3.- Los alumnos no entienden lo que leen ni lo que suman
Pese a que ha mejorado la infraestructura de los colegios, se ha hecho poco para mejorar el aprendizaje en los establecimientos. “Los bajos niveles de Simce reflejan que hay miles de estudiantes (tanto de colegios privados, subvencionados y públicos) que tienen dificultades para comprender lo que leen o para dar una opinión fundamentada”, dice la ONG.
“La silla no basta. Somos el país con la mayor cantidad de horas de clase de la OCDE y nuestros niños y niñas no están aprendiendo. Esto vulnera sus derechos y afecta enormemente sus oportunidades de desarrollo. Necesitamos innovar para aprender, transformar lo que pasa en la sala de clases, es decir: qué se aprende, cómo se aprende, con quiénes y con qué”.
4.- La deserción escolar: alumnos aburridos del colegio
“Desde la perspectiva del derecho a aprender, es un problema que haya uno o 90 mil estudiantes al año que abandonen el colegio. Además, nuestras tasas de inasistencia son altísimas y las trayectorias educativas, erráticas: jóvenes salen y entran del sistema”.
“Cuando hablamos de las causas de la exclusión educativa no sólo hay que considerar los factores tradicionales de pobreza o de problemas familiares, también hay que reflexionar sobre el interés y sentido que tiene la escuela para los niños y niñas”. “Educación 2020 ha escuchado en terreno las voces de estudiantes, diciendo que se aburren en clases o que el colegio no les hace sentido. La mayoría no falta porque no puede, sino porque no quiere ir al colegio”, concluye la experta de la ONG, Nicole Cisternas.