Los protocolos de los países sudamericanos para el retorno a clases presenciales en los colegios

Mientras en Europa desde mayo comenzó el regreso progresivo a las clases presenciales en los colegios, tras superar el peak de contagios por coronavirus, en Sudamérica esto sólo ha sido posible en algunos casos puntuales, por ejemplo, en algunos establecimientos de Chile y de manera más masiva en Uruguay.

Sin embargo, son varios los países de la región que se encuentran trabajando en los protocolos para un eventual retorno a las aulas en el marco del presente año escolar, algunos de los cuales incluso ya han sido informados a las comunidades educativas.

Uruguay

Con un total de 974 casos y 29 fallecidos, Uruguay ha sido considerado como el país de la región con mejor desempeño en la gestión de esta pandemia. De hecho, “es el único país de América del Sur que tiene una tasa de incidencia que baja de manera regular durante las últimas semanas”, afirmó este miércoles Sylvain Aldighieri, gerente de incidente para COVID-19 de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Por lo mismo, se convirtió en el primer país de Latinoamérica en volver a las clases presenciales. En un principio, y desde el 22 de abril, fue el turno de algunas escuelas rurales.

Luego, a partir del 1 de junio, fueron abriendo sus puertas de manera escalonada la totalidad de las escuelas que reciben a niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad educativa y social, después siguieron los jardines infantiles y salas cunas, y el 29 de junio comenzó el retorno del resto de los establecimientos educacionales públicos y privados del país.

Acorde al protocolo establecido por la Administración Nacional de Educación Pública, se definió el uso obligatorio de mascarillas en los establecimientos educacionales, con excepción de los niños menores de 6 años.

A ello se suma asegurar el distanciamiento físico recomendado y el lavado constante de manos para prevenir los contagios, disponer de alcohol gel, la realización de un cuestionario de síntomas que deben responder los niños y jóvenes antes de entrar y acortar e intercalar las jornadas de clases, es decir, mientras un grupo de niños asiste los lunes y martes, el resto lo hace los jueves y viernes.

De esta manera, se dejan los días miércoles en las escuelas para “la planificación técnico pedagógico, evaluación, retroalimentación, y en casos necesarios, atención de niños que requieren una atención personalizada especifica”, detalla dicho protocolo.

Argentina

Pese a que en Argentina aún no se ha entregado una fecha fija para el regreso a las clases presenciales, el ministro de Educación, Nicolás Trotta, ha expresado que eventualmente podrían hacerlo en agosto las escuelas de algunas zonas del país que cuentan con poca circulación del virus. Ello excluiría al área metropolitana de Buenos Aires, Resistencia y Chaco, además de las provincias patagónicas por un factor climático.

Bajo este escenario, y de la mano del consejo asesor creado para la planificación del regreso a las aulas, se definió el protocolo, el cual contempla primero una capacitación sobre cómo abordar e implementar la “nueva normalidad”, dirigida a todos quienes trabajan en las escuelas.

En tanto, luego de que se materialice el regreso a las aulas, cada establecimiento deberá contar con los artículos de higiene indispensables y se deberá asegurar un distanciamiento físico mínimo de 1,5 metros entre los alumnos dentro de la sala de clases, y de 2 metros en los espacios comunes.

Con respecto a esto último y ante la imposibilidad de ampliar la infraestructura de los recintos educacionales, se determinó que el regreso a los establecimientos será de manera escalonada, teniendo prioridad los alumnos de los últimos cursos de enseñanza básica y media. También habrá horarios de ingreso y salidas escalonados, con el fin de no provocar aglomeraciones en el transporte público.

Adicionalmente, y tal como ha sucedido en todos los países donde se ha materializado el regreso a los colegios, será obligatorio el uso de mascarillas, tanto por alumnos como por profesores.

Perú

En el caso de Perú, se autorizó -este 1 de julio- el regreso a las clases presenciales de algunas escuelas rurales de enseñanza básica y media emplazadas en zonas con poco riego de contagio, pero bajo un estricto protocolo que fue anunciado por el Ministerio de Educación (Minedu) del país vecino.

En él se contempla que las salas de clases no superen el 50% de su capacidad y que debe haber dos turnos como máximo, terminando la jornada de la tarde no más allá de las 17 horas. Además, el horario de clases se acotará a 4 horas diarias, donde la única excepción serán los alumnos de quinto de secundaria, quienes tendrán un bloque de 5 horas.

En tanto, en los niveles de educación inicial, enseñanza básica y media (primaria y secundaria) la asistencia será intercalada. Esto significa que un grupo de alumnos irá lunes y miércoles, mientras que la otra mitad lo hará martes y jueves. No obstante, en quinto de secundaria irán tres días a la semana, dividiéndose en lunes, miércoles y viernes, por un lado, y martes, jueves y viernes, por otro.

En cuanto a las medidas de higiene y prevención, se determinó que se debe asegurar en todo momento una distancia física mínima de 1,5 metros, realizar un lavado de manos antes de entrar al colegio y de forma frecuente a lo largo de la j0rnada, desinfectar los zapatos antes de ingresar al establecimiento educacional, uso obligatorio de mascarillas y control diario de la temperatura de los estudiantes y de todo el personal del colegio, entre otras medidas.

Brasil

El eventual regreso a las clases presenciales en las escuelas brasileñas está en plena discusión. Sin embargo, en el Distrito Federal -cuya capital es Brasilia-, un decreto del gobernador Ibaneis Rocha ya anunció que los colegios privados podrán abrir sus puertas a partir del 27 de julio, mientras que los establecimientos públicos lo podrían hacer desde el 3 de agosto.

En el caso específico de São Paulo, el retorno a los colegios se estaría materializando desde el  8 de septiembre. Para ello, el gobernador João Doria detalló que “hemos construido un plan con protocolos bien definidos de distanciamiento social, vigilancia de la salud de los estudiantes, higiene personal y ambientes escolares, para garantizar la seguridad”.

Se trataría también de un regreso gradual, donde durante la primera etapa sólo volvería un 35% de los alumnos, con el fin de poder asegurar una distancia física mínima de 1,5 metros. Se definirían además horas distintas de entrada y salida, para así evitar aglomeraciones en los establecimientos y en el transporte público.

Chile

Si bien aún no se conoce una fecha tentativa para el retorno masivo a las clases presenciales en el país, ya comenzó el regreso paulatino a las aulas en Rapa Nui y este martes abrió sus puertas la Escuela María Antonieta Parra Monsalve de Puerto Sánchez, en la Región de Aysén, la primera en hacerlo en Chile continental.

Además, el próximo lunes debería ser el turno del único establecimiento del archipiélago de Juan Fernández, el Colegio Insular Robinson Crusoe, según afirmó a EL DÍNAMO el alcalde de la comuna, Leopoldo González.

“Lo que se ha hecho hasta ahora es trabajar específicamente con el Ministerio de Salud y las comunidades que han solicitado reabrir sus establecimientos. Ciertamente esos protocolos son reglas generales que pueden perfectamente implementarse en el resto del país”, explicó la tarde de este jueves el ministro de Educación, Raúl Figueroa.

A modo de ejemplo, se ha visto que las medidas implementadas en dichos establecimientos, previa coordinación con el Mineduc y el Ministerio de Salud, incluyen el uso de obligatorio de mascarillas y/o escudos de protección facial, asegurar la distancia física recomendada y la reducción del número de alumnos por aula, junto con implementarse horarios diferidos de clases, entre mañana y tarde.