Universidad Católica lidera solicitudes de patentes por sexto año consecutivo
La casa de estudios ha solicitado el trámite por diversas innovaciones realizadas bajo su alero, como la investigación de una posible vacuna chilena contra el COVID-19.
La Pontifica Universidad Católica (UC) lideró por sexto año consecutivo las solicitudes de patentes al Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) a pesar de las dificultades por la pandemia de COVID-19.
En 2020, la casa de estudios presentó 33 prioridades de patente, de las cuales 22 son nacionales y 11 son PCT, Tratado de Cooperación en Materia de Patentes que permite solicitar en varios países la protección de las invenciones mediante patentes. En el mismo periodo se gestionó un secreto industrial y 11 registros de derechos de autor.
Además, 47 patentes fueron concedidas el año pasado, llegando a un total histórico de 212 patentes otorgadas hasta diciembre de 2020.
El rector Ignacio Sánchez señaló que los seis años seguidos de liderazgo en esta materia “muestran una cultura de transferencia y patentamiento que es muy sólida”, añadiendo que “no queda más que alegrarse de que esta transformación cultural ha alcanzado a toda la universidad”.
Las patentes a las que postula la Universidad Católica consisten en un derecho exclusivo que concede el Estado para la protección de una invención, entendida como una nueva solución a un problema técnico, la que proporciona derechos exclusivos que permitirán utilizar y explotar su invención e impedir que terceros la utilicen sin su consentimiento. Si opta por no explotar la patente, puede venderla o ceder los derechos a otra empresa para que la comercialice bajo licencia.
Bárbara Ribbeck, subdirectora de Propiedad Intelectual de la Dirección de Transferencia y Desarrollo, explicó que esta estrategia facilita la transferencia tecnológica, pues reconoce a sus creadores y genera reglas claras para la masificación de las innovaciones, siendo un incentivo al tiempo, esfuerzos y a los recursos económicos destinados al desarrollo científico, Además se facilita la llegada al mercado, disminuyendo los competidores directos mediante el derecho de monopolio que otorga la patente.
Entre las innovaciones que la universidad busca patentar está la vacuna recombinante Bacilo de Calmette y Guerin (BCG) contra el COVID-19, que está siendo desarrollada por un equipo de investigadores liderados por Alexis Kalergis, académico de la Facultad de Ciencias Biológicas.