Cómo serán las clases sin restricción de aforos con alumnos vacunados
Mineduc confirmó que avanzará en el fin de la restricción de distanciamiento físico en las salas cuando los cursos tengan por sobre el 80% de sus integrantes con su esquema completo de inoculación.
El Ministerio de Educación (Mineduc) confirmó que a partir de este viernes 1 de octubre avanzará en un nuevo protocolo, el que permitirá terminar con la restricción de aforo para las salas de clases en las escuelas cuando el 80% de los alumnos tengan su esquema de vacunación contra el COVID-19 completo.
La medida fue anunciada por el ministro Raúl Figueroa, quien planteó que con esta medida se busca ampliar el proceso de retorno voluntario a la presencialidad, el que ha resultado exitoso en la mayoría de los establecimientos educacionales del país.
“La autoridad sanitaria ha considerado conveniente que, a medida que avanza el proceso de vacunación de manera gradual, se pueda eliminar la restricción de distanciamiento físico en las salas de clases, permitiendo así que de manera segura más niños puedan asistir a clases y fomentando la continuidad del proceso educativo”, manifestó.
El fin de las limitaciones de aforo en las clases fue valorado por los sostenedores de los colegios, que buscan avanzar en la normalidad pensando en 2022. Algunos expertos, en cambio, cuestionan la acción señalando que las medidas sanitarias vigentes aún se deben mantener a pesar del avance del proceso de inoculación en niños entre los 6 y 11 años.
El nuevo protocolo
Mineduc, a través de un documento firmado por su jefe de División de Educación General, Raimundo Larraín, entregó algunos detalles sobre las nuevas medidas que estarán vigentes a finales de esta semana, las que coinciden con la implementación de un actualizado plan Paso a Paso tras el fin del estado de excepción por pandemia.
En el escrito se destacó que el 87% de los establecimientos educacionales se encuentra con clases presenciales, con el cumplimiento de la dosis de refuerzo para los trabajadores de la educación que lo requerían. Además se consignó que el 38% de los niños y adolescentes entre 6 y 17 años tienen una dosis de la vacuna y 22% cuenta con las dos. En el rango de entre 12 y 17 años la cifra de inmunizados sube al 76% con una dosis y 46% con esquema completo.
Más allá de esto, el protocolo estableció que los establecimientos parvularios y escolares podrán abrir sus puertas en todas las fases del Paso a Paso, reiterando que la asistencia es voluntaria para las familias.
En cuanto al aforo, se detalló que los niveles -todos los estudiantes de un mismo grado en una escuela- que tengan sobre el 80% de sus estudiantes con su esquema completo (14 días después de la segunda dosis) están autorizados para recibir alumnos de manera simultánea, sin la obligación de mantener el metro de distancia y propiciando el distanciamiento en las actividades “en la medida de lo posible”.
Los cursos que no alcancen este porcentaje de vacunación deberán mantener el aforo restringido, con clases que deben asegurar el cumplimiento del metro de distancia.
Otras medidas preventivas del contagio del coronavirus seguirán vigentes como la ventilación de los espacios cerrados, el uso obligatorio de mascarillas, una rutina de lavado de manos con jabón, la eliminación de los saludos con contacto físico, limpieza y desinfección de lugares, además de los controles ante eventuales síntomas como la fiebre.
Avances para los colegios
El nuevo protocolo sin restricción de aforo fue analizado por el presidente de la Corporación de Colegios Particulares de Chile (Conacep), Hernán Herrera, quien lo calificó como “una señal potente” de la autoridad en su intención de volver a la normalidad a nivel académico.
“Esta flexibilización va asociada al proceso de vacunación. Hay que entender que, mayoritariamente en los colegios, los alumnos de enseñanza media cumplirían con este porcentaje que se exige por nivel por el avance que presentan en la cobertura“, señaló el directivo a EL DÍNAMO.
Herrera explicó que el porcentaje de inoculación no se mide por cursos puntuales, sino que por niveles. En ese sentido, si todos los primeros medios de un establecimiento cumplen con el requisito podrán terminar con la obligatoriedad del distanciamiento.
El representante de los sostenedores de las escuelas particulares aseguró que a pesar de este impulso para la presencialidad la asistencia a las escuelas sigue siendo voluntaria para las familias, lo que significa que “durante todos este tiempo hay que mantener esta situación híbrida de educación tanto presencial como remota”.
“La única diferencia es que a medida que vayan retornando los alumnos a las clases presenciales, probablemente la educación remota no sea en línea, no sea sincrónica. Sería asincrónica enviando cápsulas a la nube. No se puede descuidar a los que se quedan en casa”, precisó.
El líder de Conacep enfatizó además que la vacunación en los menores de edad es voluntaria y con la autorización de los padres, explicando que “uno no puede readecuar un curso dependiendo si están vacunados o no”.
“Por eso se establece esta holgura de al menos 20% para los alumnos que no están vacunados en todo un nivel”, añadió, señalando que los niños no inoculados no pueden ser discriminados ni separados del resto de la comunidad escolar.
Las dudas sanitarias
El fin de las restricciones de aforo en clases provocó sorpresa y algunas dudas en los expertos que han seguido la pandemia, quienes siguen alertando por la presencia del virus a pesar de la reciente caída en los casos.
Ignacio Silva, infectólogo de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago (Usach), planteó que si bien la vacunación ha sido un elemento clave para lograr un relativo control de la crisis sanitaria requiere de otros elementos complementarios, entre ellos el distanciamiento físico mínimo para un espacio cerrado como la sala de clases.
“El principal objetivo de las vacunas es disminuir los casos graves asociados al COVID-19, las hospitalizaciones, los requerimientos de UCI, de ventilación mecánica y la mortalidad, pero no son tan efectivas para evitar el contagio”, señaló el especialista a EL DÍNAMO.
Silva agregó que “mientras exista pandemia y circulación viral significativa los aforos son importantes porque nos ayudan a disminuir los riesgos de contagio, entonces las vacunas son una herramienta pero hay que complementarla con medidas preventivas básicas como el uso de mascarilla, respetar los aforos, las distancias físicas, disminuir las situaciones de alta exposición donde se generan hacinamiento”.
De todas formas, el académico valoró el proceso de inoculación de los niños entre 6 y 11 años, explicando que la vacuna CoronaVac de Sinovac “es segura” al usar la tecnología de virus inactivado, la misma de las fórmulas contra la influenza que se aplican todos los años en menores de edad.