El punk europeo se reencuentra con el arte en Roma
Irreverente y atrevido, el movimiento punk
que marcó a toda una generación a finales de los años setenta tuvo
también, en Europa, una importante influencia en las artes visuales
que se ha mantenido viva hasta hoy y que puede verse estos días en
una exposición en el Palacio de los Médicis de Roma.
Irreverente y atrevido, el movimiento punk
que marcó a toda una generación a finales de los años setenta tuvo
también, en Europa, una importante influencia en las artes visuales
que se ha mantenido viva hasta hoy y que puede verse estos días en
una exposición en el Palacio de los Médicis de Roma.
“Europunk”
es el título de la muestra, que propone un recorrido por el período
más fructífero de la música punk (1976-1980) con especial atención
a su influencia en el arte a través de más de quinientas piezas,
muchas de ellas inéditas, en el marco de un palacio renacentista de
una de las familias más notables de Florencia.
La exposición
se abre con las notas de Sex Pistols en su primera aparición en
televisión en 1976, en el programa “So it goes”, fecha que
muchos consideran como el nacimiento oficial del movimiento punk, y
se cierra con la intervención de Joy Division en la cadena de
televisión británica BBC en 1979 y el nacimiento de la New
Wave.
Pero, más que música, “Europunk” es una
reivindicación de la influencia que estos grupos supusieron para el
arte de aquella época casi sin querer, desde la banda de Sid Vicious
hasta The Clash pasando por grupos como Joy Division o
Crass.
Organizada por la Academia de
Francia en Roma, la muestra puede verse hasta el próximo 20 de marzo
en su sede situada en la Villa Medici, en el corazón de Roma, antes
de trasladarse el próximo mes de junio al Museo de Arte Moderno y
Contemporáneo (MAMCO) de Ginebra.
En total, 550 objetos entre
vestidos, pósters, diseños, revistas, fanzines, collages, fundas de
vinilos, entradas de concierto y material audiovisual testimonio del
período más fructífero del punk, que cobran especial importancia
en una época en la que “las imágenes y los objetos del
movimiento han sido recuperados por el mercado y por el sistema
comercial”.
El
famoso cartel con el rostro de la reina de Inglaterra Isabel II con
los ojos y la boca tapada por el título “God save the Queen”
sobre una bandera británica, o el cartel publicitario para el
lanzamiento de “Anarchy in the UK” producido por el artista
Jamie Reid, son dos de las piezas más destacadas.
Junto a
ellas, pueden verse varias prendas diseñadas por Malcolm McLaren y
Vivienne Westwood, así como carteles publicitarios ideados por Jon
Savage para conciertos de Joy Division o The Pop Group, en una
muestra que tiene como punto de partida y meta el Reino Unido, pero
que vuelve la vista también a importantes centros creativos de la
época como Francia, Alemania, Suiza, Italia u Holanda.
EFE
cpr/cps/is