Curioso: demandante de Galliano lo defiende de críticas por racismo
El hombre que demandó al diseñador británico John Galliano, luego de hacer público el video en donde lanza injurias racistas y por el cual fue despedido de la casa Dior, cree que "no es racista ni antisemita", y que las palabras del "superaron lo que pensaba en el momento".
En una entrevista publicada hoy por el diario francés Le Parisien, el denunciante -identificado únicamente como Philippe- se mostró convencido de que el modisto "está muy en
El hombre que demandó al diseñador británico John Galliano, luego de hacer público el video en donde lanza injurias racistas y por el cual fue despedido de la casa Dior, cree que “no es racista ni antisemita”, y que las palabras del “superaron lo que pensaba en el momento”.
En una entrevista publicada hoy por el diario francés Le Parisien, el denunciante -identificado únicamente como Philippe- se mostró convencido de que el modisto “está muy enfermo”, en referencia a su adicción alcohólica, y señaló que para él las palabras de Galliano fueron “ante todo una provocación” dentro de “una simple discusión de bar”.
“John Galliano no merece esto. No quiero que se le destruya así”, apostilló Philippe, quien sin embargo dijo no poder retirar la denuncia que presentó junto a una amiga contra el diseñador porque “la máquina judicial ya está en marcha”, y además el mismo modisto les ha demandado a ellos. Sobre los hechos, explicó que la noche del 24 de febrero el diseñador británico les abordó en estado ebrio y “muy perturbado psicológicamente” y comenzó a proferir insultos “durante 45 minutos”.
Según su versión, los camareros del bar La Perle donde se desarrolló el incidente no sólo no quisieron intervenir, sino que “al contrario, le trajeron un mojito cuando ya estaba bien alcoholizado”. “Si no hubiese llamado a la policía, hubiésemos acabado por pegarnos”, manifestó el demandante, quien aseguró no haber reconocido entonces al célebre modisto y no saber de quién se trataba hasta que leyó la prensa al día siguiente.
Galliano, que fue despedido de la firma Christian Dior al hacerse público un vídeo de un hecho anterior en el que, visiblemente ebrio, manifestaba su adoración por Hitler, ha sido imputado por injurias racistas y podría ser sancionado con hasta 6 meses de cárcel y 22.500 euros (unos 31.000 dólares) de multa.
Vía Galliano no es racista, sino provocador, según su demandante en La Voz de Galicia