Diez canciones que musicalizaron protestas en la calle
Debido al movimiento estudiantil que reclama por una educación igualitaria, las protestas por la lentitud en la reconstrucción y las manifestaciones pidiendo una ley antidiscriminación, nos abocamos a elegir las canciones que han reflejado el descontento social durante la historia.
Una canción de protesta está asociada a un movimiento que busca un cambio social. Puede ser entonada por la defensa del medio ambiente, la educación, la igualdad de derechos o mejoras laborales, entre otras causas.
El estilo de este tipo de música no tiene un formato definido y abarca desde el folk hasta el punk, del rap al reggae y desde el soul hasta el pop más comercial. Lo que importa no es la sonoridad, sino el mensaje que se transmite.
Bob Marley & The Wailers – Get Up, Stand Up
No sólo es la canción oficial de lucha de Amnistía Internacional, sino que es un himno que trascendió el tiempo y las fronteras. Fue pensada originalmente para luchar contra la opresión y la esclavitud del pueblo jamaicano a mano de los ingleses, pero es usada en casi en toda manifestación ciudadana actualmente. El mensaje de Marley era claro: “Párate y lucha por tus derechos”.
The Clash – Campdown
De la mente iluminada de Joe Strummer salió esta canción que protestaba contra el capitalismo reinante en la sociedad inglesa durante los años 70. Las letras hablan acerca de las personas que son absorbidas por el sistema económico y que no reaccionan ante ello. Strummer lo resume así: “¡Son los mejores años de tu vida los que ellos quieren robar!”.
Phil Ochs – I Ain’t Marchin’ Anymore
Contemporáneo de Bob Dylan, Ochs compuso esta notable canción al ritmo del folk. En ella contaba la historia de un joven norteamericano obligado a ir a innumerables guerras por su país, hasta que decide no “marchar más”. El coro aún es aplicable a los conflictos militares actuales: “Son siempre los más viejos los que nos llevan a la guerra, pero siempre son los jóvenes los que caen”. Ochs realizó su última protesta a los 35 años, cuando se despidió de este problemático mundo, ahorcándose en un árbol.
Gil Scott-Heron –The Revolution Will Not Be Televised
Un poema y una canción. Así se define este tema del fallecido compositor norteamericano, Gil Scott-Heron. La letra habla sobre la discriminación y represión del pueblo negro, además de presentar una ácida crítica a la cultura de la televisión y a las miles de personas absortas frente a la caja idiota, mientras las matanzas de la población afroamericana ocurrían en sus barrios. El músico hablaba sobre el alzamiento de la población negra y lo dice sagazmente: “La revolución no va ser televisada, hermano/ La revolución será en vivo”.
John Lennon & Plastic Ono Band – Give Peace a Chance
John Lennon era un hombre que sabía cuánto valía un buen slogan. Sólo basta recordar el imperecedero: “Todo lo que necesitas es amor”. Give Peace a Chance se fraguó como una canción anti-guerra, específicamente la de Vietnam. Su repercusión y popularidad fue tan grande, que medio millón de personas la cantaron frente a la Casa Blanca en Washington, pidiendo de una vez que terminara la incursión en Vietnam. Las miles de voces coreaban y pedían: “Darle una oportunidad a la paz”.
James Brown –Say It Loud, I’m Black and I’m Proud
Porque el funk también sirve para protestar y más aún si el responsable es James Brown. En 1968 el compositor estadounidense estaba harto de lo que llamaran “negro” u “hombre de color”. Su respuesta fue escribir este notable tema que habla sobre los derechos civiles y los constantes abusos de los que eran víctimas los afroamericanos en Estados Unidos durante los años 60. Fue grabada con un coro de niños que entonaron un mensaje inspirador para el pueblo: “Díganlo fuerte, soy negro y estoy orgulloso”. Amén.
Creedence Clearwater Revival – Fortunate Son
El talento creativo de John Fogerty craneó esta canción anti-guerra en 1969, durante la incursión militar estadounidense en Vietnam. En ella, hablaba sobre las personas que no tienen la fortuna de ser “el hijo de un senador o de un millonario”, apuntando claramente a la clase privilegiada que invoca patriotismo, mientras mandan a la guerra a los menos favorecidos para que hagan el trabajo sucio.
Public Enemy – Fight The Power
El rap siempre ha sido una herramienta de protesta poderosa. Y quién mejor para hacer una canción tan significativa contra el racismo que los legendarios Public Enemy. Este tema es una verdadera bomba contra el racismo con ritmos infecciosos y letras punzantes que llaman a los afroamericanos a hacer valer sus derechos y a los “blancos” a verlos como personas. Ni Elvis Presley se salvó de estos raperos que le dedicaron la siguiente línea: “Elvis era un ídolo para muchos/ Pero para mí no significaba ni una mierda/ Racista es lo que era ese tonto/ Simple y sencillo”. Al mentón.
Bob Dylan –The Times They Are a-Changin’
En el repertorio de Dylan hay por lo menos, diez grandes canciones de protesta. Con “The Times They Are a-Changin’”, escrita en 1964, logró una de sus más significativas composiciones, tanto así que fue llamada el himno de los años 60. La canción habla sobre el descontento social que había en Estados Unidos por la clase política y augura que los tiempos están cambiando. Un mes después de grabar este tema, el Presidente John F. Kennedy fue asesinado a tiros. Dylan actuó la noche siguiente al crimen y abrió precisamente con esta canción, como buscando una explicación a lo inexplicable.
Rage Against The Machine – Wake Up
Es bastante difícil elegir solo una canción de este grupo para este ranking, ya que la mayoría de sus letras hablan sobre aspectos sociales y políticos. Temas sobre guerra como “Killing In The Name” o de libertad como “Freedom”, eran las elecciones más obvias. Fuimos un poco más allá y seleccionamos este notable tema sobre el racismo imperante en USA y de los intentos que hizo el FBI por tratar de eliminar la influencia de los líderes del movimiento negro estadounidense: Malcolm X y Martin Luther King. En las líricas, incluso hay un fragmento de un memorándum que escribió el director del FBI, J Edgar Hoover, donde sugería suprimir dicho movimiento. Zach de la Rocha lo deja claro articulando las siguientes palabras: “¿Cuál era el precio por sus cabezas?”.