Iglesia Católica francesa niega estar detrás de protestas por obras de teatro “blasfemas”
Una de ellas es "Gólgota picnic" del argentino Rodrigo García, la cual está inspirada en la Biblia como "una fábula interesantísima por su belleza del lenguaje, la calidad de la imaginación y su lado ético".
La Iglesia Católica francesa se desvinculó hoy de las protestas organizadas para el próximo sábado 29, contra dos obras de teatro que algunos han tachado de blasfemas, una de ellas “Gólgota picnic”, del argentino Rodrigo García, que se representará en París y en Toulouse.
A través de un comunicado, la Conferencia Episcopal de ese país negó estar detrás de la manifestación convocada para criticar la obra, que está programada entre el 16 y el 20 de noviembre en el teatro Garonne de Toulouse (sur de Francia) y del 8 al 17 de diciembre en el Théâtre du Rond-Point, de París.
La protesta, convocada por la plataforma Civitas Institut, pretende arremeter tanto contra la pieza del argentino como contra la titulada “Sobre el concepto del rostro, en el hijo de Dios”, del italiano Romeo Castellucci, que se representa en el Théâtre de la Ville de París.
Este último espectáculo, que expone una escatológica reflexión bíblica sobre la relación paternofilial, llevó a sus detractores a lanzar cadenas, bombas fétidas y lacrimógenas al escenario durante su representación, y a tratar de bloquear las puertas de acceso a la sala, según los responsables del Théâtre de la Ville.
“La Iglesia Católica en Francia condena las violencias perpetradas durante los recientes espectáculos”, declaró la Conferencia Episcopal en un comunicado en el que destaca que aquella es “promotora del diálogo entre la cultura y la fe” y “reacciona, cuando es necesario, con determinación, y siempre por medios pacíficos”.
El portavoz de la Conferencia Episcopal, Bernard Podvin, llamó, no obstante, “a la libertad de expresión respetuosa con lo sagrado” y solicitó un diálogo con los cargos electos en lo que respecta a ese “desafío”, en línea con sus declaraciones de septiembre, cuando pidió que no se destinase “ni un euro público” a una producción, en referencia a “Gólgota picnic”, que “denigra un culto”.
La pieza de García se inspira en la Biblia, “una fábula -según el autor- interesantísima por su belleza del lenguaje, la calidad de la imaginación y su lado ético”, para crear un espectáculo en el que se utilizan miles de panes de hamburguesa al aludir al milagro de Jesucristo.
“La Iglesia católica en Francia no es ni integrista ni oscurantista. Los católicos aspiran, como ciudadanos, a ser respetados en el corazón de su fe”, agregó Podvin.
No es la primera vez este año que el mundo del arte se ve sacudido por los ataques de integristas religiosos. En abril, dos obras del artista neoyorquino Andrés Serrano, de las que una consiste en la fotografía de un crucifijo sumergido en un bote de orina, fueron destruidas en el Museo de Arte Contemporáneo de Aviñón, en el sur de Francia.
La obra “Piss Christ”, que había sido objeto de críticas por movimientos religiosos, fue destruida a martillazos, tras la celebración de una manifestación católica.