Fuerte polémica por festival de música neonazi en Australia
El evento se celebra desde hace dos años pero había mantenido un bajo perfil hasta ahora. Autoridades aseguran no poder prohibirlo: "Nuestra función no es impedir a la gente que exprese opiniones imbéciles".
La organización del festival de música neonazi Hammered en la ciudad de Brisbane en abril ha suscitado una fuerte polémica en Australia, mientras que las autoridades aseguran que no pueden prohibir su celebración.
“Nuestra función no es impedir a la gente que exprese opiniones imbéciles, estúpidas y erróneas (…) Si quieren hacer el tonto y demostrar su mentalidad, es asunto de ellos“, manifestó el fiscal general del estado de Queensland, Paul Lucas, según publican hoy los diarios del país, entre ellos el “Courier-Mail”.
“Pero si incitan a la violencia o quiebran la legislación sobre antidiscriminación, entonces serán investigados y perseguidos“, añadió Lucas.
El legislador independiente Rob Messenger, del Parlamento de Queensland, se ha hecho eco del descontento entre su electorado y ha impulsado una campaña para que haya “leyes más estrictas que permitan prohibir y sancionar actividades neonazis o que empujen al odio racial”.
Messenger prepara proyecto de ley que contempla penas de cárcel y multas de hasta 300.000 dólares para los que organicen eventos neonazis.
El festival Hammered, que gestionan los grupos Southern Cross Hammerskins y Blood and Honour Australia, comenzó a celebrarse hace dos años en Queensland y ha mantenido un perfil discreto hasta esta edición, que ha elegido como lugar de celebración Brisbane, la capital de ese estado australiano.
Southern Cross Hammerskins (Cruz del Sur) es la rama australiana de esta organización internacional creada en 1987 en Estados Unidos e ilegalizada en países como Alemania, España y Portugal.
Blood and Honour es una red internacional neonazi fundada en el Reino Unido en 1987 y con ramificaciones por Europa, Estados Unidos y Australia.
Australia, un país colonizado en el siglo XVIII en el que conviven descendientes de británicos y de inmigrantes de todos los continentes y una reducida población aborigen, tiene grupos neonazis en varias ciudades.
La problemática de la violencia emanada por los grupos que predican la supremacía blanca en Australia se plasmó en películas como “Romper Stomper”, escrita y dirigida por Geoffrey Wright, y protagonizada por Russell Crowe.