Michael Bublé armó una ‘fiesta’ junto a sus fanáticos en su primer concierto en Chile
El destacado artista salió a escena con un impecable terno negro y corbata azul para interpretar 'Cry me a river', ante el delirio de los fans, para luego seguir con 'All of me', antes de agradecer en idioma español a los 12 mil asistentes al recinto de Parque O'Higgins.
El cantante canadiense Michael Bublé hizo de su primer concierto en Chile una verdadera “fiesta”, tras una impecable presentación esta noche donde interactuó con los asistentes y se dio el lujo de cantar parte de sus principales éxitos en medio del público que repletó el Arena Santiago (Parque O’Higgins), en el marco de su exitoso Tour Mundial ‘Crazy Love’.
El denominado ‘último crooner’ (36 años) y con más de 30 millones de discos en el mundo tras una exitosa carrera de casi una década, donde ha revivido géneros como el jazz, el blues y el swing, partió el show con una hora de retraso (22:00 horas), tras ser teloneado durante 40 minutos por una banda neoyorkina llamada ‘Naturally 7’, que sorprendió con voces muy potentes de sus siete integrantes.
El destacado artista salió a escena con un impecable terno negro y corbata azul para interpretar ‘Cry me a river’, ante el delirio de los fans, para luego seguir con ‘All of me’, antes de agradecer en idioma español a los 12 mil asistentes al recinto de Parque O’Higgins. “Qué pasa Santiago. Buenas noches. Mi nombre es Michael Bublé y estoy muy feliz de estar con ustedes. Para mí es un honor (…) Esto no es un concierto, será una fiesta”, dijo en un escenario con dos grandes pantallas alargadas detrás, ideado especialmente por Mark Fisher, el mismo encargado del tour ‘The Wall 2012’ de Roger Waters.
Luego, el admirador de figuras como Frank Sinatra, Dean Martin y Tony Benett tocó ‘Mack the Knife’ y su éxito ‘Everything’, antes de presentar en detalle y con mucho humor a su banda, compuesta por siete músicos (trombón, guitarra, trompeta, piano, saxofón, batería y bajo), entre ellos el chileno Yerko Rodríguez, quien animó al público e incluso provocó un sonoro grito de ‘Viva Chile’, al mejor estilo de los partidos de la selección nacional de fútbol.
Posteriormente Bublé cantó ‘I’ve got the world on a string’, tema de Frank Sinatra, antes de tocar breves acordes de covers de Journey, Peabo Bryson e incluso Bruno Mars. Tras ello llegaron lucidas interpretaciones de ‘Crazy Love’, donde la gente iluminó con sus celulares todo el estadio y ‘You’ll never know’, acompañado sólo de una trompeta.
El crooner hizo bailar al público con ‘How Sweet it is’, antes de reconocer su gusto personal por Michael Jackson y The Beatles, al cantar breves covers de los clásicos ‘Billie Jean’ y ‘Twist and Shout’, respectivamente. Los asistentes deliraron con algunos pasos que el artista realizó en honor al fallecido ‘Rey del Pop’.
Luego vendría la habitual e hilarante ‘locura’ de sus conciertos: descender desde el escenario a la platea baja para saludar a los fans. Los guardias tuvieron mucho trabajo al intentar contener a la gente, que hacía un esfuerzo por tocar al ídolo o sólo sacarse una foto con él. Mientras recibía las muestras de afecto, cantó el cover ‘All i do dream of you’.
Bublé, ya en una tarima especialmente habilitada para la ocasión, y en medio de los fans, interpretó el tema ‘Wonderful’ junto a uno de sus teloneros, modificó la hermosa balada ‘Home’ a un formato Unplugged, donde además hizo alusión a que a la capital Santiago ya la sentía como “su casa”, y cantó ‘Save the last dance’ en medio de un regreso donde no sólo tuvieron trabajo los guardias, sino los sonidistas, pues la amplificación se fue por varios segundos, en quizás el único punto negro de la velada.
Tras ello el norteamericano, quien muchos ya catalogan como el ‘sucesor de Sinatra’, cantó el cover de Eagles ‘Heartache Tonight’, le dio un pequeño homenaje a Black Eyed Peas con ‘Tonight is gonna be a good night’ y provocó emoción al recibir una bandera chilena sobre el final de ‘Haven’t Met you yet’, tema que precedió a su primer y único bis de la noche.
Michael Bublé cerró su exitosa presentación con su mayor hit ‘Feeling good’, una coreada versión de ‘Me and Mrs Jones’ y la hermosa balada ‘A song for you’, donde impresionó al cantar la última parte literalmente a capella (sin micrófono y sin instrumentos), ante el delirio de los 12 mil fans y la satisfacción del artista, quien aprovechó de agradecer en vivo a su esposa presente (la modelo y actriz argentina Luisana Lopilato), sus músicos y la gente por la buena recepción, antes de irse a descansar para su segundo y último concierto, agendado para este domingo 18 de marzo a las 21:00 horas en el mismo ‘Movistar Arena’.