Zambra: "Lemebel merece el Premio Nacional de Literatura pero no sé si el Premio lo merece a él"
En una columna de opinión agregón que "los medios aprovechan la temporada para mostrar a los escritores peleando a lo Titanes del ring, cuando la noticia principal es que hay un premio pésimamente formulado y a nadie parece importarle".
El escritor Alejandro Zambra cree a ciencia cierta que el Premio Nacional de Literatura debería recibirlo Pedro Lemebel porque plantea que ha conseguido “lo que poquísimos consiguen: Construir un público, crear lectores, muchos de ellos jóvenes poco o nada interesados en las lecturas obligatorias”.
Así lo plasmó en una columna para la Revista QuéPasa, donde explica que “Lemebel supo ir más allá de las expectativas de la prensa y de los paralizantes marcos teóricos. Su obra, estudiada en decenas de universidades en todo el mundo, ha demostrado una consistencia y una relevancia mucho mayor que la que le atribuían los que lo ninguneaban a grito pelado en los 90, y que ahora, resignados a una escala diferente de lo políticamente correcto, siguen ninguneándolo sotto voce”.
En ese sentido, Zambra continuó criticando que “no tengo dudas de que Lemebel merece el Premio Nacional de Literatura, pero estoy menos seguro de que el Premio merezca a Lemebel. Los medios aprovechan la temporada para mostrar a los escritores peleando a lo Titanes del ring, cuando la noticia principal es que hay un premio pésimamente formulado y a nadie parece importarle”.
Luego continuó recalcando el impacto que puede generar Lemebel: “Pienso en quienes salieron del clóset gracias a Lemebel, pero no me refiero solamente -lo que ya sería bastante- a los que después de leerlo se atrevieron a enfrentar su identidad sexual, sino también a quienes, homosexuales o no, gracias a él descubrieron o redescubrieron el brillo y el poderío de las palabras, la necesidad de una escritura, su urgencia: porque escribir de verdad, mirando a quienes amamos y a quienes odiamos de frente, y sobre todo intentando, por más que cueste o que duela, mirar hacia el fondo de nosotros mismos, es siempre salir del clóset”.
Finalmente cerró su columna erigiendo la figura de un “premio colectivo”, el concepto que utilizó además para titular la columna: “Pedro Lemebel nos recuerda que la literatura no es inofensiva, que no es un mero adorno, que le hace algo a la sociedad. Premiarlo a él sería premiar eso. Sería, pienso, un premio colectivo”.