Ismael Serrano y su nuevo disco: "Es un llamado a huir de la resignación"
El cantautor español vuelve con "La Llamada", una placa cargada de emoción y comentarios sociales.
Con quince años de trayectoria, el cantautor español Ismael Serrano vuelve a Chile a promocionar su más reciente trabajo, La Llamada. Un disco maduro, marcado por situaciones personales como el nacimiento de su hija, pero también por la crisis económica que atraviesa España, donde a su juicio “la ciudadanía se está mirando a sí misma como hace tiempo no ocurría”.
Serrano explica que el título guarda relación con los carnavales uruguayos, donde las comparsas y tambores van “llamando” a los vecinos a sumarse. “Me gustaría pensar que estas canciones tiene también esa vocación de convocatoria, y a la vez tienen un cierto carácter de celebración aunque retraten una realidad difícil. Lo que uno pretende con esto es levantar la mirada, hacer un llamamiento a huir de la resignación y del inmovilismo“, agrega.
Así, este nuevo disco es, en las propias palabras del cantautor, “una llamada a resistir, a rebelarse, y quizá un poco, emulando los versos de Benedetti, “a defender la alegría como una trinchera, como un derecho”. Cada lucha debe estar traspasada por la alegría, y más aún en estos tiempos”.
¿Pero cuánto de la crisis por la que ha pasado en España en los últimos años está presente en este álbum? “Yo creo que bastante”, dice. “Efectivamente, canciones como “La casa y el lobo” están inspiradas en el drama de los desahucios y sobre todo, en la heroicidad de esos ciudadanos que son capaces de enfrentarse a los desahucios e impedirlos, organizados en plataformas ciudadanas. No solamente eso, sino visibilizar esa tragedia, y hacer que la sociedad t0me conciencia… Eso merecía una canción”, enfatiza.
Y no sólo una: varias de las canciones contenidas en el álbum hacen referencia a la contingencia hispana. “La Llamada“, por ejemplo, “es un canto a esos ciudadanos y ciudadanas que viven en la precariedad laboral absoluta, que es… uno de los efectos de esta crisis es precisamente esa precarización, Se está dando un fenómeno en España que es novedoso: el hecho de que tienes trabajo y eres pobre. Tener un salario no te salva de la pobreza y eso es absolutamente novedoso. Aún el que tiene empleo vive en la precariedad, en una sociedad atomizada en la que se nos quiere hacer entender que ciertos derechos son privilegios”, manifiesta Serrano.
“El otro día salía la presidenta del Círculo de Empresarios de España, Mónica de Oriol, diciendo sin ningún pudor que los derechos, los permisos de maternidad y demás, eran un privilegio y que había que reconsiderarlos. Que ella contrataría antes a una mujer menor de 25 años y mayor de 45 antes que a cualquier otra. Y lo decía sin ningún complejo, sin ningún pudor”, sostiene.
“Digamos que esta crisis ha supuesto un empuje para potenciar, para exacerbar un poco el delirio neoliberal en que estamos viviendo, el delirio del desmantelamiento de los derechos de los ciudadanos”
“He escuchado afirmaciones como ‘no nos podemos permitir una sanidad pública como la que tenemos’… ¿cómo que no nos la podemos permitir? Si hasta ahora el problema no era de deuda pública ni de déficit del Estado, todo lo contrario. En España se da el caso en que la deuda privada ha pasado a ser pública cuando rescatamos a las entidades financieras que estaban en juicio”, reflexiona el músico.
Refiriéndose a otras canciones de corte social en este disco, Serrano destaca “Rebelión en Hamelin“, a la que destaca como “una llamada al cuestionamiento del liderazgo, pero sobre todo al cuestionamiento de un relato que pone como hegemónico, como oficial. Nos hablan de la crisis como si fuera un fenómeno de la naturaleza; y nos hablan de los ajustes como si fueran fruto del determinismo científico, incuestionables, como si no hubiera alternativa política”.
También está “El Día de la Ira“, que para el cantautor es “quizá la canción más oscura del disco”, y en cuyas letras se habla “del nivel de hartazgo y de indignación de la ciudadanía, que se siente desamparada y que está profundamente cansada, viendo cómo el Estado salva a las instituciones financieras y deja desamparados a los ciudadanos que no pueden afrontar el pago de sus hipotecas a esas mismas instituciones financieras (…) En España no existe la dación en pago, es decir, la posibilidad de devolverle la casa al banco y que tu te quedes sin deuda, no; te la quitan y encima tienes la deuda, es totalmente disparatado”, subraya.
Para Ismael, entonces, “es inevitable que la crisis esté en el disco. Es que mires donde mires está presente. Mi trabajo como músico se ve afectado, por que la prioridad para la gente no está en la compra de una entrada. Y las instituciones no amparan a la cultura, más bien la atacan, suben el IVA en forma despiadada… Eso esta ahí, no es algo que “me han contado”. Tienes que componer sobre eso”.
“Yo a veces me pregunto hasta qué punto los músicos estamos a la altura de las circunstancias, si estamos siendo capaces de ponerle relato, no solamente a la crisis, también a los nuevos movimientos sociales, a lo que está ocurriendo”, considera el cantautor. Pero por otro lado, “habría que ser Houdini para poder escapar de este contexto de crisis a la hora de componer”, afirma.
“No hablo de una canción de un compromiso político explícito y tal, sino de una mínima sensibilidad social, de empatía”, sentencia Serrano, un autor que guarda “un gran cariño y una deuda” con Chile y Latinoamérica, una tierra de cuyos ritmos también ha sabido empaparse, lo que queda reflejado en varios temas de este, su noveno disco, que presentará en vivo en nuestro país en mayo de 2015.