Patricio Guzmán no da tregua: “La visión positiva que se tiene de Chile es un mito”

Por estos días, Patricio Guzmán se encuentra disfrutando del éxito que ha causado su documental “El botón de nácar” en el Festival de Cine de Berlín tras su estreno el domingo pasado, que lo llevó directo a la carrera por el preciado Oso de oro que se entregara este sábado. En la cinta, el cineasta denuncia el genocidio de los indígenas y los crímenes de Pinochet acompañados de espectaculares imágenes de la Patagonia chilena, fotos de archivo de la Nasa y de los primeros pobladores del lugar tomadas hace un siglo por un misionero austríaco, además de testimonios actuales..

Pero no solo se ha dedicado a promocionar su película, Guzmán también aprovechó de dar a conocer la visión que tiene de nuestro país lanzando duras críticas a la prensa local. El domingo pasado, sostuvo que “en Chile no hay libertad de prensa y tampoco hay libertad de imagen. El Estado subvenciona ciertos documentales, que luego no se pasan por televisión. Es un contrasentido, en un país donde aún no se investigaron los crímenes de la dictadura. Han pasado cuarenta años, pero hay un temor de hablar detalladamente de qué ocurrió“.

Esta vez, el realizador no dio tregua a sus declaraciones y en entrevista con medios alemanes, señaló que la visión positiva que se tiene de Chile en el mundo “es un mito”. 

“Por supuesto, es un país más civilizado que Bolivia, que Perú y probablemente que muchos países centroamericanos”, declaró en esta oportunidad. Añadió también que “Santiago parece una ciudad norteamericana en algunos barrios, pero hay una desigualdad social enorme, la educación es mala, los hospitales funcionan mal. Eso hay que decirlo en Chile, para poder superar el golpe de Estado: es un país ideologizado”.

Aprovechando la temática que toca su nueva producción, Guzmán aseguró que “en Chile no se habla del pasado”, refiriéndose específicamente al Golpe de Estado y la dictadura militar. Al respecto mencionó el rol que tuvieron los militares en los hechos y que hasta el día de hoy “nunca han confesado los crímenes que han cometido: hay un pacto de silencio”.

“El tipo de tragedia como el golpe de Estado que hubo en Chile dura cien años. Poco a poco, las cosas se van a restablecer pero muy lentamente. Poco a poco la memoria va a ir saliendo”, aseguró.