FOTO + VIDEO | La osada historia de la abuela que salió de un hogar de ancianos para tatuarse
Cuando los miembros de la tienda le preguntaron qué pensaría su familia del tatuaje, Sadie respondió tajante: "Me importa una mierda".
Tony Sellers iba sagrada y constantemente a visitar a su madre, Sadie, al hogar de ancianos Daleview House en la que vive hace un año. Pero algo había ocurrido: esta vez no la encontró
La buscó muy preocupado por todo el recinto que está ubicado en el condado de Londonderry, Irlanda del Norte. Fue a todos los lugares que frecuentaba su madre en el lugar. Sin embargo, el personal de la casa le dijo que la mujer había salido al centro acompañada por su nieta, Samantha.
De inmediato, Sellers llamó a su hija Samantha, quién le confirmó que estaba junto a ella y le dijo la dirección dónde se encontraban. Y ahí vino lo que jamás se esperaba: Vio a su madre rodeada por tres veinteañeros mientras se hacía un tatuaje de un corazón.
“Todos creían que ella era fantástica”, dijo su hijo sorprendido al Daily Mail. “Nunca mencionó nada acerca de querer uno, pero me parece que lo estaba planeando hace un rato”, agregó.
Y claro, la mujer tiene las cosas muy claras y está convencida de hacer lo que se le plazca. Por eso, cuando los miembros de la tienda le preguntaron qué pensaría su familia del tatuaje, Sadie respondió tajante: “Me importa una mierda”.
“Cuando llegas a mi edad, tienes que vivir la vida al máximo cada día. Estaba hablando de eso con Samantha por un par de semanas cuando me mostró su tatuaje”, afirmó la anciana.
La mujer, que dijo no haber sentido ningún dolor, volvió con su familia al geriátrico, donde el personal corrió a ver su corazón de tinta.
Revisa a continuación el video que relata curiosa esta historia: