El sensible motivo por el que Adriano Castillo apoya la discusión sobre el aborto

A pesar de haber terminado hace algunos años su emisión en televisión, Adriano Castillo sigue siendo para la gran mayoría de los chilenos el Compadre Moncho de Los Venegas, situación que a a estas alturas ya considera “un poco latero el estigma, pero es lógico también que eso ocurra”.

El actor participó en la sección Manifiesto de La Tercera, donde entregó varias confesiones respecto a su vida familiar. “Me dolió profundamente la muerte de mi padre“, señaló, revelando además que “nunca nos besamos en vida, no tuvimos demostraciones de cariño. Nos queríamos mucho, él era muy estricto, pero éramos muy buenos compañeros“. Pero cuando falleció, “él estaba sonriendo. Eso, sin dudas, alivió mi pena. Esa vez fue la primera vez que le di un beso. El hielo que me quedó en los labios me quedó una semana”.

Por otro lado, Castillo también se dio el tiempo de hablar de su fallida candidatura como Core en las elecciones de 2013. “Yo sabía que era imposible, pero lo intenté porque quería pasar por esa experiencia más que nada por el contacto con la gente“, dijo al respecto. Pero de dicha experiencia, algo rescató de manera positiva: “Saqué casi 34 mil votos, el doble de lo que sacó Jocelyn-Holt, así es que no estuve tan mal tampoco”, afirmó.

Para el actor de teleseries, como “Peleles” de Canal 13, el contingente tema del aborto toca una fibra sensible en él. Esto, debido a que la primera mujer con la que se casó perdía a los bebés a los primeros meses. “Después de nuestro primer hijo, Javier, hubo un segundo embarazo que parecía ser exitoso pese a que ella usaba métodos anticonceptivos. Ella lo perdió a los 5 meses. Ya era un hombrecito. Recuerdo haber sentido dolor por ese hecho”, reveló.

“Por lo mismo, me interesa que la gente discuta sobre el aborto. La pérdida fue un dolor muy profundo, porque ese niño estaba formado“, agregó.

Pero no todo es color gris para Adriano. Si hay una pasión que el no niega por ningún motivo es la hípica, una tradición de familia. “En la universidad, empecé a apostar yo. Desde entonces juego todas las semanas. En esto, el que dice que gana siempre, miente asquerosamente. En esto más se pierde que se gana. Pero la raya para la suma es lo bien que se pasa”, señaló.