Karen Doggenweiler desclasifica detalles de su vida con ME-O y la salida del matinal de TVN
Doggenweiler aseguró que decidió hacer un cambio en su vida tras asistir a un seminario de Fresia Castro, experta en la activación de la glándula pineal.
Karen Doggenweiler y Marco Enríquez-Ominami llevan doce años de matrimonio, pasando de la televisión y la farándula a la vida política. Aunque últimamente la pareja está más enfocada en el aspecto político, luego de la salida de la periodista del matinal de TVN, donde estuvo casi una década.
En su primera entrevista tras ese episodio -en “Mujer Glam” de la señal VIVE- el ex rostro fuerte de Televisión Nacional reveló aspectos de su vida personal con el candidato presidencial del PRO y las razones por las que decidió dejar de trabajar en el extinto “Buenos días a todos”.
“Con Marco nos gustamos, nos reímos mucho, tenemos mucha onda”, dijo a la conductora del programa, Ana Sol Romero. Además, confesó que le “hubiese gustado tener más guaguas”.
En esa línea, Doggenweiler aseguró que decidió hacer un cambio en su vida tras asistir a un seminario de Fresia Castro -experta en la activación de la glándula pineal-. “Es una mujer fantástica. Fui sábado y domingo, y el lunes renuncié” al matinal de TVN, dijo.
“Fue así de instantáneo, así de milagroso y mágico. Más que saber, creo yo, me di cuenta de lo que no quería y eso es súper importante. Además, es un momento para tomar decisiones sobre dónde quieres estar y dónde no quieres estar”, agregó en la entrevista.
La periodista confesó que no quería seguir haciendo un programa en la mañana. “Quería más tiempo con mis hijas, quería estar más con Marco. No quería sentir el domingo después de almorzar, como a las 4, ese dolor de guata como cuando una tenía prueba de matemáticas, y alargar lo más posible la sobremesa del almuerzo para que pasara rápido. Empecé a sentir todas esas cosas y eso era lo que no quería”, explicó.
“Yo creo que ellos (Marco y su familia) ya lo sabían y me apoyaron absolutamente. Por ejemplo, era muy difícil que yo pudiera organizar una comida en mi casa, o que en la mañana pudiera despertarme y llevar a mi hija al colegio. Nunca la había llevado”, contó.