Justicia confirma multa contra La Red por perfomance de activista trans en Las Gansas
En fallo unánime, la Octava Sala del tribunal de alzada rechazó el recurso de apelación de la estación de TV.
La Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la resolución del Consejo Nacional de Televisión (CNTV), que aplicó una multa de 80 UTM (4,3 millones de pesos) a La Red, por la emisión de programa que denigra la dignidad de quienes profesan la fe católica.
En fallo unánime, la Octava Sala del tribunal de alzada rechazó el recurso de apelación de la estación de TV, multada por el contenido del programa Las Gansas, emitido el 21 de agosto del año pasado.
“La transmisión ya referida y descrita amagó la dignidad personal y el derecho a la igualdad y no discriminación de las personas que profesan la fe cristiana –descartándose la imputación de amago al principio democrático y paz social–, por lo que tomando en cuenta la gravedad de la infracción acordó multar a la concesionaria con monto de 80 UTM”, indicó el tribunal.
Junto con ello, “resultó relevante que, previo reconocerse el pleno ejercicio por parte de la concesionaria de su libertad de programación, decidió incorporar en su programa Las Gansas una serie de presentaciones audiovisuales que buscaban conmemorar a una fallecida artista, utilizando el travestismo y la performatividad como una forma de expresión artística de las minorías y disidencias sexuales y contraculturales, siendo que en el curso de una de ellas se detectaron una serie de elementos que son contrarios al respeto debido por la diversidad de creencias religiosas, lo que en definitiva configuró un ejercicio abusivo de la libertad de expresión que afectó bienes y valores tutelados por el art. 1° de la ley 18.838, a saber, por la vía de un ejercicio discriminatorio y atentatorio contra la igualdad ante la ley y la dignidad de quienes profesan la fe católica, lo que amaga la libertad de culto o religiosa consagrada en la Constitución”.
La polémica se originó durante la presentación de Anastasia Benavente, quien interpretó una canción sobre la sexualidad, junto a un hombre que actuaba de esclavo, indicando que “esta performance va dedicada al Papa Francisco y a les constituyentes, para que por fin en este país Iglesia y Estado sean asuntos separados”.