No solo el quiebre con Pamela Díaz: la otra noticia que golpea a Jean Philippe Cretton
Jean Philippe Cretton se valió de su cuenta de Instagram para dar cuenta del difícil momento que vive a nivel íntimo.
Jean Philippe Cretton atraviesa por días complejos. La noche del sábado confirmó el fin de su relación con Pamela Díaz tras casi cuatro años, luego de que se difundiera un video en el que aparece besando a otra mujer, provocando que se especulara de una presunta infidelidad, algo que descartó.
A dos días de ello, ahora el animador de Chilevisión recibió otro duro golpe en su vida: la muerte de su abuela, algo que dio a conocer a través de su cuenta de Instagram.
“Alcancé a llegar para acompañar a mi viejita linda en sus últimos momentos“, consignó el comunicador en la red social. “Se apaga lento como una estrella, como la estrella que siempre ha sido”, agregó en su Instagram Stories.
Durante la mañana de este lunes, Jean Philippe Cretton dedicó una emotiva publicación en la red social a su abuela tras su muerte. En él también plasmó lo que ha vivido recientemente por su ruptura con Pamela Díaz.
“Han sido días difíciles los últimos. Por una parte, he recibido un nivel de agresividad y odio que considero desproporcionado. Juzgan sin saber. Sin conocer detalles. Gozan rasgando vestiduras, hacen gárgaras de moral, se burlan de mi depresión y apedrean en la plaza pública como antaño. Desde su púlpito de supuesta perfección”, sostuvo.
En esa misma línea, indicó que, por otro lado, “he recibido muestras de amor inusitadas. De mi entorno, que conoce mi integridad, sabe quién soy, cómo soy y cómo he sido en la vida, pero también de gente que no conozco que abraza, empatiza con cariño genuino y puede ver todo en perspectiva”.
La muerte de su abuela
En medio de lo difícil que ha sido para Jean Philippe Cretton, se refirió también a la muerte de su abuela, destacando cómo fue parte de su vida.
“Mi abuelita fue hija única. En el campo había labores destinadas a hombres, pero las hacia ella. Mi abuelita se casó muy joven y tuvo dos hijos. Mi abuelita diseñó su casa sin saber de arquitectura, ni nada parecido. Era una mujer de campo. Mi abuelita hacía un queso muy rico. Hacía empanadas y picarones para el 18”, es parte de las palabras que le dedicó a la mujer.
“Mi abuelita se fue a descansar y pude tomar su mano por última vez, en un momento en que ambos lo necesitábamos. Gracias por todo, viejita linda”, cerró.