Corrupción en la FIFA golpea a la ANFP: Sergio Jadue habría recibido 1,5 millones de dólares en sobornos
El ministerio de Justicia de Estados Unidos reveló que la empresa a cargo de los derechos comerciales de la Copa América 2015, Datisa, tenía un esquema para pagar sobornos a dirigentes de la Conmebol.
Hoy la Oficina Federal de Justicia de la Confederación Suiza confirmó que los latinoamericanos Eugenio Figueredo, Eduardo Li, José Maria Marin, Julio Rocha, y Rafael Esquivel se encuentran entre los siete altos dirigentes de la FIFA detenidos hoy por los cargos de organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero, entre otros.
Tres de ellos, además, ocupaban altos cargos en la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol): Figueredo era vicepresidente, Marín era miembro ejecutivo al igual que Esquivel.
Según información entregada por el ministerio de Justicia de Estados Unidos -quienes llevan adelante las acciones judiciales- revelaron, además, que la empresa a cargo de los derechos comerciales de la Copa América Chile 2015, Datisa, tenía un esquema para pagar sobornos a estos dirigentes.
En abril de 2010 la Conmebol acordó con la empresa Full Play los derechos mediáticos y de marketing para las ediciones 2015, 2019 y 2023 de la Copa América, así como de otros torneos. Luego acordaron la realización de la Copa Centenario de 2016 en Estados Unidos.
En mayo de 2013, se creó la empresa Datisa la que agrupó en partes iguales los intereses comerciales de Traffic Group (empresa multinacional brasileña de marketing deportivo), Torneos y Competencia S.A (TyC, dedicada a la transmisión de eventos deportivos) y Full Play (empresa dedicada al negocio de marketing deportivo). Esto ocurrió tras una reunión realizada en marzo de ese año en Buenos Aires donde se acordó el pago de un soborno por 10 millones de dólares acordado por Full Play junto con TyC para Conmebol en relación con los derechos de Copa América.
Tras la operación realizada por estas tres empresas, Datisa firmó en Londres un contrato con Conmebol para obtener los derechos comerciales a nivel mundial de las Copas de 2015, 2019, 2023 y la del Centenario de 2016. Así, la nueva razón comercial acordó pagar U$100 millones en sobornos a oficiales de Conmebol -todos de FIFA- a cambio del contrato de Copa América firmado en 2013: U$20 millones por la firma del contrato y U$20 millones por cada una de las cuatro ediciones del torneo.
Cada pago de estos U$20 millones en sobornos fue dividido de la siguiente manera: U$3 millones para cada uno de los tres oficiales de Conmebol, el presidente de la Confederación y los presidentes de las asociaciones de Brasil y Argentina; U$1,5 millones a cada uno de los otros siete presidentes de las federaciones de Conmebol, entre ellos Sergio Jadue, presidente de la ANFP; y 500 mil dólares para otros once oficiales de Conmebol.
Los dirigentes que solicitaron o recibieron sobornos incluyen a los acusados latinoamericanos en la acción de la justicia de Estados Unidos más cinco de los “cómplices” cuyos nombres aún no se revelan, y otros dirigentes más.
El pago de estos sobornos se realizó entre junio y septiembre de 2013 usando instituciones financieras en los Estados Unidos.
El comunicado de la Conmebol
Ante estos nuevos antecedentes, la Confederación Sudamericana de Fútbol emitió un comunicado donde manifestaron su repudio a “todo acto de corrupción y apoyar irrestrictamente las investigaciones iniciadas y las que se iniciaren tanto a la FIFA, CONMEBOL, CONCACAF, y otras organizaciones de fútbol respecto de supuestos actos irregulares, comprometiéndose en colaborar abierta y enfáticamente con dichas investigaciones”.
Tambien señalaron que respetarán “en cualquier circunstancia del juzgamiento, de la declaración de la inocencia o la culpabilidad de las personas involucradas” y velarán “por la vigencia de la verdad, la ética y la transparencia de las actividades de la FIFA, CONMEBOL y Asociaciones integrantes”.