Un muerto y siete heridos por cohetes palestinos en el sur de Israel
Eli Shenhar, teniente coronel de la Comandancia de Defensa Civil, recordó esta noche a los habitantes del sur de Israel que deben entrar en los refugios cuando oigan las alarmas antiaéreas, que no han dejado de sonar todo el fin de semana.
Un israelí murió hoy y otros siete resultaron heridos -dos en estado crítico-, en un ataque palestino con varios cohetes contra la ciudad israelí de Beer Sheva que reivindicaron los Comités Populares de Resistencia (CPR).
El ejército israelí informó de que cinco cohetes fueron lanzados esta noche desde Gaza contra esa ciudad de más de 150.000 habitantes, tres de los cuales fueron derribados por el nuevo sistema antimisiles “Kipat Barzel” (Iron Dome).
Los otros dos impactaron en un auto, cerca del cual estaban la mayoría de las víctimas, y en una vivienda.
Eli Bin, director general de Maguen David Adom (equivalente local a Cruz Roja), explicó en una conversación telefónica con la televisión israelí que las ambulancias recogieron a cuatro heridos graves y uno falleció camino del hospital.
La mayoría de las víctimas se encontraban alrededor del auto en un espacio abierto, lo que explica el elevado número de víctimas y la gravedad de las heridas.
Eli Shenhar, teniente coronel de la Comandancia de Defensa Civil, recordó esta noche a los habitantes del sur de Israel que deben entrar en los refugios cuando oigan las alarmas antiaéreas, que no han dejado de sonar todo el fin de semana.
Los Comités Populares de Resistencia (CPR) reivindicaron el lanzamiento de los cohetes contra Beer Sheva, atribuidos originalmente al brazo armado de Hamás, los Batallones de Azedin al Qasam, que en cambio reclamaron el lanzamiento de otro cohete poco antes contra la ciudad de Ofakim.
La milicia de Hamás se desvinculó en las últimas horas del acuerdo de tregua alcanzado en 2009 con Israel tras la operación Plomo Fundido, en respuesta a los “crímenes contra el pueblo palestino”, los catorce muertos y decenas de heridos que los bombardeos israelíes han dejado en Gaza desde los atentados del jueves en Eilat.
Israel aminoró hoy los ataques aéreos a la espera de que los esfuerzos diplomáticos de Egipto para devolver la calma den sus frutos.
Analistas militares recordaban, al analizar la entrada en juego de la milicia de Hamás, que ésta puede conducir a un peligroso empeoramiento de la situación porque dispone de un arsenal que Israel calcula en 10.000 cohetes de distintos alcances.
Y explicaban que Israel debe considerar si quiere entrar en un nuevo enfrentamiento armado como el de diciembre de 2008, la llamada operación Plomo Fundido, en la que murieron 1.400 palestinos y 13 israelíes.
El ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, está reunido con los principales altos mandos del Ejército para hacer una evaluación de la situación y decidir la estrategia que deben seguir las fuerzas armadas ante el incremento hoy de los lanzamientos de cohetes.
Más de veinte, y al menos quince proyectiles de mortero, alcanzaron hoy el territorio de Israel.
El diputado ultraderechista Arie Eldad exhortó al gobierno de Benjamín Netanyahu a comenzar a asesinar a los líderes de Hamás, empezando por su primer ministro, Ismail Haniye.
