Ante posibilidad de terremoto: Japón cambiaría de capital
Según diversas teorías científicas, dentro de los próximos 30 años, Tokio podría verse afectado por el llamado Big One, un movimiento telúrico de gran intensidad cuyo epicentro sería en tierra firme y arrasaría la capital.
Luego de que hace un par de semanas el ex primer ministro japonés Naoto Kanrevelara a medios locales los temores que lo asaltaron al conocer el escape de radiación de la planta nuclear Fukushima 1, diversos sectores políticos y empresariales han vuelto a poner sobre el tapete la posibilidad de mover a otra ciudad la capital japonesa o, como mínimo, tener una capital de emergencia en caso de que Tokio sea destruida por un fuerte terremoto.
Según diversas teorías científicas, dentro de los próximos 30 años, Tokio podría verse afectado por el llamado Big One, un movimiento telúrico de gran intensidad cuyo epicentro sería en tierra firme y arrasaría la capital.
“Las escenas de Tokio desierto, sin una sola persona por las calles, pasaron por mi mente (…) fue realmente un pensamiento escalofriante”, confesó al diario “Asahi” el ex jefe de Gobierno, quien aseguró, además, que evacuar a 30 millones de personas, la población de Tokio y alrededores, hubiera sido imposible.
“Japón no hubiese soportado como país, si la zona de evacuación alrededor de la planta de Fukushima hubiese sido de 200 kilómetros”, indicó Kan. Tokio se ubica a poco más de 250 kilómetros de la central nuclear en problemas.
En la zona del desastre, numerosos municipios fueron arrasados por el mar y, hasta ahora, no pueden volver a funcionar, mientras que otros han debido instalarse fuera de su jurisdicción para poder operar y comenzar con las labores de reconstrucción.
El proyecto de mover la capital del país a otra ciudad no es un tema nuevo; sin embargo, siempre se vio obstaculizado por los intereses económicos de diversas regiones que competían entre sí por hospedar la capital. Luego del terremoto del 11 de marzo, las disputas han sido reemplazadas por una sensación de urgencia que incluso ha impulsado a un grupo de parlamentarios independientes a preparar un proyecto de ley para crear una capital sustituta; posiblemente, será presentado a la Dieta en las próximas semanas.