Alertan que los matrimonios forzados en Alemania no son aislados
Lo que más llama la atención, según el informe, es que las personas afectadas están aparentemente bien integradas en la sociedad germana.
Los matrimonios forzados entre la población de origen extranjero en Alemania no son un fenómeno aislado, a juzgar por las 3.443 personas que sólo en 2008 solicitaron asesoramiento al respecto, revela un informe presentado hoy por la ministra de la Familia, Kristina Schröder.
De las 3.443 personas afectadas, el 93 % eran niñas y mujeres, de las cuales más del 70 % eran menores de 21 años, precisa el documento, por lo que abordar este tema en las escuelas debería ser básico.
“Sólo las niñas más valientes buscan ayuda de forma activa en un centro de asesoramiento, pero damos por supuesto que la cifra de personas afectas es mucho mayor”, señaló Christa Stolle, secretaria general de la organización Terre des Femmes.
Según el estudio, más del 25 % de las personas que buscaron asesoramiento declararon que otros miembros de su familia también sufren o viven bajo la amenaza de un matrimonio forzado.
Lo que más llama la atención, según el informe, es que las personas afectadas están aparentemente bien integradas en la sociedad germana.
El 32 % nació en Alemania y el 44 % posee la nacionalidad germana, aunque su futuro conyugal se decida fuera del país.
Más del 52 % de los matrimonios forzados tienen lugar o se pactan en el extranjero, por lo que Stolle reclamó que este tipo de uniones celebradas fuera del país puedan ser castigadas penalmente en Alemania.
El 43 % de las personas afectadas temen ser llevadas a la fuerza al extranjero y obligadas a vivir fuera de Alemania a largo plazo.
“No puede ser que el Estado alemán no cumpla con su deber de asistencia con estas jóvenes mujeres. Es necesaria una labor consecuente de prevención mucho antes del momento en el que son arrastradas por la fuerza fuera del país”, afirmó Stolle.
El motivo de estos matrimonios forzados, según la mayoría de afectadas, tiene que ver con el honor familiar y el concepto de supremacía del hombre.
Por ello que Stolle reclamó del Gobierno una amplia campaña “para mostrar nuevos modelos positivos para mujeres y hombres”, con el objetivo de que puedan escoger libremente su pareja.
Además, el estudio indica que el 67 % de las personas afectadas han sido víctimas de violencia: más de la mitad sufrieron violencia física y el 27 % fueron incluso amenazadas de muerte en caso de no acceder al matrimonio forzado.