Rousseff llega a Cuba en viaje de acento económico y DD.HH como telón de fondo
Tras aterrizar mañana en La Habana, la agenda oficial de Rousseff comenzará el martes con el habitual homenaje al héroe nacional José Martí antes del reunirse con el presidente cubano, Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución, según el programa divulgado en la isla.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, llegará este lunes a Cuba en su primera visita oficial a la isla para repasar la relación bilateral, principalmente la económica y comercial, y con los derechos humanos como telón de fondo.
Tras aterrizar mañana en La Habana, la agenda oficial de Rousseff comenzará el martes con el habitual homenaje al héroe nacional José Martí antes del reunirse con el presidente cubano, Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución, según el programa divulgado en la isla.
Sobre la visita de Rousseff, el canciller brasileño, Antonio Patriota, declaró que “con Cuba hay una relación cercana en el plano político, y en el plano económico cada vez más”, según dijo en una entrevista publicada por El Mercurio.
A propósito de los cuestionamientos sobre la situación de los derechos humanos en Cuba, Patriota considera que todos los países tienen retos en materia de derechos humanos y de democracia y cree que lo importante es que en la región latinoamericana “haya un reconocimiento de la especificidad cubana”.
La mandataria brasileña visita la isla pocos días después de haber concedido un visado de turista a la bloguera crítica Yoani Sánchez para viajar al país suramericano.
Sánchez envió a Rousseff una carta en la que le pidió que intercediera por ella ante el Gobierno cubano para conseguir el permiso de salida de la isla para acudir al estreno del documental titulado “Conexión Cuba-Honduras”, que trata sobre la represión de la libertad de expresión en la isla caribeña.
El momento de la visita también está marcado por las críticas que en los últimos días ha recibido Cuba, principalmente de España y Estados Unidos, por la muerte del preso Wilman Villar, miembro de la ilegal Unión Patriótica de Cuba, en una huelga de hambre, según la disidencia interna.
Pero, según funcionarios del Gobierno brasileño, la agenda de Rousseff en Cuba estará marcada por cuestiones de cooperación económica, en infraestructuras y en las áreas de educación y salud.
También la presidenta está interesada en conocer de cerca la política de actualización del modelo económico socialista de la isla.
Justamente la visita de la mandataria brasileña a la isla se producirá tras la primera Conferencia del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC, único) que este fin de semana se dedicó a revisar los métodos de trabajo y política de cuadros de la organización ante el proceso de reformas económicas abierto en el país.
Rousseff también tratará con las máximas autoridades cubanas sobre la marcha de las obras de ampliación del puerto de Mariel (oeste de La Habana), consideradas las más importantes que se ejecutan actualmente en Cuba con financiación del coloso suramericano.
En ese proyecto están asociadas empresas brasileñas y cubanas con una inversión total que rondará los 800 millones de dólares, y de acuerdo al cronograma su entrega está prevista para el año 2013.
Las relaciones económicas con Brasil se han intensificado en los últimos años, para convertirse en uno de los principales socios en el terreno del comercio y la inversión, de acuerdo con fuentes oficiales.
En el quinquenio 2006-2010, el intercambio comercial entre Brasilia y La Habana registró un crecimiento de 30 por ciento, al pasar de 376 millones de dólares a 488 millones, según datos oficiales.
Entre enero y noviembre de 2011 el flujo comercial bilateral siguió con un ritmo ascendente y llegó a 570 millones de dólares.