Argentina pone en marcha polémico régimen de importaciones en Mercosur
Desde mañana quienes deseen ingresar a Argentina bienes de consumo deberán presentar una Declaración Jurada Anticipada de Importación, información que será analizada por diferentes organismos estatales que validarán la operación en un plazo de tres a diez días.
Argentina pondrá en marcha este miércoles un nuevo régimen para las importaciones de bienes de consumo dentro de una política proteccionista que ha desatado polémicas y rechazos entre empresarios del Mercosur, el bloque comercial que comparte con Brasil, Paraguay y Uruguay.
Desde mañana quienes deseen ingresar a Argentina bienes de consumo deberán presentar una Declaración Jurada Anticipada de Importación, información que será analizada por diferentes organismos estatales que validarán la operación en un plazo de tres a diez días.
Tras anunciar la puesta en marcha de este régimen hace tres semanas, el Gobierno argentino argumentó que, en un contexto de crisis global, su “prioridad” es mantener este año un superávit comercial del orden de los 10.000 millones de dólares mediante políticas de seguimiento de las importaciones e incentivos a la producción nacional.
Pero la medida ha despertado polémicas entre los socios de Argentina en el Mercosur, el mayor bloque comercial de Suramérica, tanto entre representantes gubernamentales como en dirigentes industriales de Brasil, Paraguay y Uruguay.
El presidente uruguayo, José Mujica, dijo el pasado día 12 que las nuevas “medidas proteccionistas” de Argentina “van a perjudicar” el comercio con Uruguay, aunque descartó realizar algún reclamo formal debido a los beneficios que los turistas argentinos generan al país en términos de divisas.
Por su parte, tras conocer el nuevo régimen de importación dispuesto por Buenos Aires, el ministro de Industria de Brasil, Fernando Pimentel, aseveró que las relaciones comerciales con Argentina han sido “un problema permanente” para Brasil.
“Tenemos buenas relaciones políticas, pero económicamente es difícil lidiar con ellos”, aseguró el ministro brasileño.
Por su parte, la delegación paraguaya en el Parlamento del Mercosur presentó la semana pasada una protesta formal contra la medida argentina, a la que calificó como “impensable en un proyecto integrador, pero lamentablemente coherente con una administración que se ha distinguido por su excesivo apego a la protección desorbitada de sus intereses en detrimento de sus pares vecinos”.
En Brasil, el mayor socio comercial de Argentina, también ha alzado su voz Paulo Skaf, titular de la Federación de Industrias de Sao Paulo (Fiesp), quien dijo que la relación bilateral ha sufrido un “desgaste” con “falta de confianza” provocada por el proteccionismo argentino.
Tras el inicio de la crisis económica internacional, a mediados de 2008, Argentina ha puesto en marcha diversos mecanismos comerciales para proteger su producción local, como la implementación de licencias no automáticas para la importación y acuerdos con sectores clave, como el automotriz, para balancear importaciones con exportaciones.
Asimismo, ha sido uno de los impulsores dentro del Mercosur para la adopción dentro del bloque, en diciembre pasado, de un mecanismo que permita a los socios aumentar temporalmente los aranceles para la importación de ciertos bienes como medida de protección frente a las derivaciones de la crisis global en el comercio internacional.
De hecho, el Boletín Oficial argentino publicó hoy un decreto que “pone en orden” sus normativas aduaneras con las vigentes en el Mercosur, explicaron a Efe fuentes oficiales que negaron que esta medida sea el paso previo al aumento del Arancel Exterior Común a 100 ítems aduaneros pactado entre los cuatro socios del bloque.