“Histórico” juicio puede obligar a que tabaqueras revelen sus secretos
El juicio "intentará establecer la responsabilidad con respecto al daño causado a la salud de la población de Québec. Nuestro objetivo es asegurar que la verdad prevalece y se hace justicia para los miles de personas que han sufrido debido a su adicción o que han muerto por esta causa".
Hoy se inició en Montreal un “histórico” juicio que podría obligar a las principales compañías tabaqueras de Canadá a pagar 27.000 millones de dólares en concepto de daños a los fumadores de la provincia de Québec y revelar sus secretos.
El juicio, que se considera el mayor caso civil de la historia judicial canadiense, enfrenta a centenares de miles de fumadores de la provincia francófona contra las tres tabaqueras más importantes de Canadá: Imperial Tobacco Canada, Rothmans, Benson & Hedges y JTI-Macdonald.
La Asociación Canadiense contra el Cáncer (CCS por sus siglas en inglés) calificó el juicio de “histórico”, en un comunicado emitido por su director Asuntos Públicos, Jean-Daniel Hemlin.
El juicio “intentará establecer la responsabilidad con respecto al daño causado a la salud de la población de Québec. Nuestro objetivo es asegurar que la verdad prevalece y se hace justicia para los miles de personas que han sufrido debido a su adicción o que han muerto por esta causa”, explicó Hemlin.
El caso se inició en 1998 cuando los tribunales de Québec recibieron dos demandas populares de fumadores de la provincia contra las empresas tabaqueras.
La primera demanda fue presentada ese año en nombre de Jean-Yves Blais, de 67 años de edad quien empezó a fumar cuando tenía sólo 10 años. Blais desarrolló cáncer de pulmón y en 1997 se le extirpó parte de un pulmón.
Blais, que sigue vivo y que fuma más de un paquete al día porque, según ha declarado, es incapaz de dejar el tabaco, reclamó 105.000 dólares para cada uno de los fumadores de Québec que han sufrido cáncer de pulmón, laringe o garganta, así como enfisema.
La segunda demanda fue presenta por Cecilia Letorneau, quien empezó a fumar en 1964 a los 19 años de edad, en nombre de los 1,8 millones de fumadores de Québec. Letorneau solicitó 10.000 dólares para cada uno de los fumadores de la provincia.
En el año 2005, el Tribunal Supremo de Québec ordenó consolidar las dos demandas populares en un sólo caso y las asociaciones de lucha contra el tabaco calculan que en la actualidad la demanda podría suponer 27.000 millones de dólares.
Los demandantes señalan que durante décadas la empresas tabaqueras ocultaron a los consumidores las consecuencias médicas del tabaquismo y que a pesar de tener estudios que demostraban su toxicidad, en sus campañas publicitarias restaron importancia a los efectos del tabaco.
Imperial Tobacco, la única de las tres compañías demandadas que comentó hoy sobre el caso, expresó a través de un comunicado su satisfacción con el inicio del juicio por entender que la responsabilidad recae sobre las autoridades canadienses, que fueron durante décadas sus “socios virtuales”.
Las compañías tabaqueras ya han señalado que si pierden el juicio pedirán que sea el Gobierno canadiense quien pague las compensaciones.
“Especialmente agradecemos la oportunidad de contar toda la historia sobre el desarrollo, la producción, promoción y venta de tabaco en Canadá” dijo Imperial Tobacco.
La empresa recordó que el Gobierno canadiense “ha legalizado, regulado de forma extrema y aplicado impuestos al sector del tabaco” y señaló que las autoridades “han sido un socio virtual con el sector en todos los aspectos de la fabricación y comercialización de los productos del tabaco durante décadas”.
Pero los demandantes también acusan a las compañías de destruir documentos en un intento de dificultar las acciones legales contra el sector.
“Además de solicitar la compensación para las víctimas del sector del tabaco, el juicio proporciona una oportunidad excelente para descubrir la verdad sobre el conocimiento de las compañías tabaqueras y su conducta”, afirmó CCS.
“Se espera que se presenten como pruebas documentos internos y secretos de las compañías tabaqueras, lo que proporcionará la oportunidad de descubrir las muchas tácticas engañosas empleadas por esta industria sin escrúpulos”, añadió la Asociación Contra el Cáncer de Canadá.
Se espera que el juicio dure hasta el año 2014.
Otras cuatro provincias canadienses también han iniciado acciones legales contra las compañías tabaqueras para recuperar parte de los costes del tratamiento de los fumadores y se espera que otras seis jurisdicciones presenten demandas contra las empresas.