Fuerza conjunta de 5.000 soldados africanos irá a la caza de Joseph Kony
El líder del Ejército de Resistencia del Señor, que es acusado de crímenes de guerra por la Corte Penal Internacional, será buscado por tropas de Uganda, Sudán del Sur, Congo y la República Centroafricana, con respaldo de la ONU.
Una fuerza militar conjunta de 5.000 soldados comenzará este sábado una intensa búsqueda para dar con Joseph Kony, buscado por crímenes de guerra por la Corte Penal Internacional (CPI) y líder del Ejército de Resistencia del Señor (LRA, por sus siglas en inglés).
Las tropas -procedentes de Uganda, Sudán del Sur, República Democrática del Congo y República Centroafricana, los cuatro países afectados por la actividad criminal del LRA- cuentan con el respaldo de las Naciones Unidas y de la Unión Africana (UA), anunciaron hoy fuentes militares en Entebbe (localidad cercana a Kampala).
“Con este nuevo mandato, Uganda deja de trabajar unilateralmente para atrapar a Kony y los miembros del LRA”, explicó el coronel Dick Olum, responsable de la fuerza.
El representante especial para contraterrorismo de la UA, Francisco Madeira, indicó a los periodistas, por su parte, que “los países han tratado de atrapar a Kony antes, pero fallaron por no haber estado debidamente coordinados”.
“Esta es una fuerza autorizada por la UA para poner fin a Kony y a sus secuaces”, apuntó Madeira.
El pasado mes de octubre, la Administración Obama envió un centenar de asesores militares a la zona para dar un empujón a la captura de Kony, un criminal que ha conocido la fama mundial recientemente debido a una controvertida campaña de la ONG estadounidense “Invisible Children” (“Niños invisibles”).
El conflicto del norte de Uganda, donde el LRA ha asesinado, mutilado, secuestrado y violado a miles de personas, en su mayoría niños, desde finales de los años 80, se trasladó, desde 2006, a los países vecinos, que ahora aportan también tropas para dar caza al guerrillero.
En 2005, la CPI emitió una orden de arresto contra Kony y otros altos cargos del LRA por crímenes de guerra.
“La lucha comenzó para defender a la población acholi de las represalias del presidente (de Uganda), Yoweri Museveni”, dijo el pasado mayo Kenneth Banya, antiguo consejero de Kony y ex número tres del LRA en los 18 años que estuvo en las filas de los rebeldes, para los que dijo haber sido reclutado por la fuerza.
Pero después -y hay distintas versiones sobre cómo se produjo el cambio de objetivo- Kony y sus milicias empezaron a luchar con el supuesto objetivo de instaurar un Estado teocrático bajo los Diez Mandamientos en Uganda.
En sus escasos contactos con la prensa, Kony siempre ha negado los cargos.