Día de la Tierra: Estalla la violencia entre palestinos e israelíes
Un palestino murió y decenas resultaron heridos, en los enfrentamientos que tuvieron lugar este viernes en toda Cisjordania, Gaza y Jerusalén. A las protestas en la zona se sumaron en Líbano, Siria, Egipto y Jordania.
Un palestino murió y decenas resultaron heridos, la mayoría leves, en los enfrentamientos con fuerzas israelíes que tuvieron lugar hoy por toda Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este con motivo del Día de la Tierra.
A las protestas en la zona se sumaron en Líbano, Siria, Egipto y Jordania miles de activistas pro-palestinos y refugiados, en una convocatoria internacional bajo el nombre de “Marcha Global a Jerusalén” que, al caer la noche, tenía aún en vilo al Ejército israelí.
Las manifestaciones más violentas tuvieron lugar después del mediodía en Gaza y el paso fronterizo de Kalandia, entre Jerusalén y Ramala.
La víctima mortal es un joven de 20 años, identificado como Mahmud Zakut, que falleció en un hospital de la franja a causa de las heridas que había sufrido a primera hora de la tarde, informó Adnan Abu Salmiye, portavoz de los servicios de emergencia.
Unas 10.000 personas participaron en el norte de Gaza en una manifestación que tuvo lugar frente al paso de Erez y en la que varias decenas de manifestantes consiguieron burlar los retenes levantados por el movimiento islamista Hamás y llegar hasta la cerca de seguridad, donde los soldados israelíes abrieron fuego para impedir que la cruzaran.
El portavoz agregó que el número de heridos en la franja se ha elevado en las últimas horas de seis a una veintena.
En el paso fronterizo de Kalandia, miles de personas se concentraron en otra marcha contra la expropiación de tierras por Israel y la “judaización” de la ciudad santa, motivos de la jornada de conmemoración.
Fuentes militares dijeron que después de los rezos en la mezquitas, unos doscientos jóvenes palestinos lanzaron piedras y cócteles incendiarios contra las fuerzas que vigilan el paso y quemaron neumáticos en sus proximidades.
Soldados del Ejército y agentes de la Policía de Fronteras respondieron con equipos antidisturbios, que causaron unos veinte heridos, la mayoría por inhalación de gases, informan medios locales.
Disturbios de parecida intensidad tuvieron lugar a la misma hora en Jerusalén Este, donde se pudo constatar cómo la policía israelí disolvía por la fuerza una manifestación de medio millar de personas con banderas palestinas -inusual en la zona que Israel considera su capital eterna e indivisible-.
“No nos echarán”, “Marcharemos sobre Jerusalén”, fueron algunos de los lemas que corearon los manifestantes hasta que, transcurrida una hora, cientos de agentes cargaron contra ellos a pie y a caballo.
En la carga los policías hirieron a seis manifestantes y arrestaron a al menos catorce, entre ellos al ex ministro para Asuntos de Jerusalén en la ANP Hatem Abdel Kader.
Una conmemoración palestina
La ola de protesta estaba convocada en coincidencia con el Día de la Tierra, una jornada que conmemora la muerte de seis árabe-israelíes (palestinos de ciudadanía israelí) en una manifestación en 1976 contra la expropiación de terrenos en la Galilea.
Allí la jornada transcurría en calma con una marcha central de conmemoración con 5.000 participantes en la aldea de Deir Hana, y otras de menor participación en las vecinas Kfar Kana, Arabe y Sajnín, así como en Wadi Naem, en el Negev, y Yafo, junto a Tel Aviv.
En principio la de hoy es una conmemoración de la minoría palestina de Israel, pero con el tiempo Cisjordania y Gaza, también afectadas por las expropiaciones, la han convertido en una jornada contra la colonización.
“La lucha para proteger nuestra tierra de la empresa colonial israelí y del terrorismo de los colonos es una realidad diaria en los Territorios Palestinos Ocupados. Hoy celebramos el derecho de Palestina a la libertad y la lucha digna (..) por la independencia”, expresó el negociador palestino Saeb Erekat en un comunicado.
El general israelí Yoav Mordejai dijo durante una visita a Kalandia que “nuestras fuerzas actúan con determinación y con moderación“, pero “tienen órdenes claras de no permitir que nadie llegue a Jerusalén”.
Se refería al lema del Día de la Tierra y a la iniciativa internacional que ha reunido en Jordania, Siria, Egipto y Líbano a decenas de miles de manifestantes.
Unos 15.000 jordanos y activistas internacionales se congregaron en la localidad de Kafrein, para una marcha simbólica hasta el río Jordán, el punto geográfico más cercano a Jerusalén.
En Siria hubo una manifestación en la capital y en El Cairo se ha informado de una concentración en la Plaza Tahrir.
En Líbano, varios miles marcharon hacia la fortaleza de Beaufort en una concentración que, según fuentes militares israelíes, fue controlada por el ejército regular libanés.
El año pasado, con motivo del Día de la Nakba (Catástrofe), quince personas perdieron la vida cuando cientos trataron de cruzar desde Líbano, Siria y Gaza al territorio controlado por Israel.
Mordejai mostró hoy su satisfacción por el que no se hayan repetido los sucesos del año pasado y por el que las fuerzas de seguridad palestinas “hayan hecho su trabajo y no dejarán que las manifestaciones fueran a mayores” en Cisjordania