Millonario desembolso: Argentina pone fin al último vestigio de su "corralito"
La Mandataria definió este logro como el cierre de un "ciclo histórico" de fuerte endeudamiento de Argentina que culminó con la debacle financiera de 2001. El país canceló este viernes la última cuota US$ 2.197 millones.
Argentina puso fin al último vestigio que quedaba del “corralito” bancario impuesto hace 10 años, al saldar este viernes 3 de agosto la última cuota de 2.197 millones de dólares de bonos emitidos para compensar a los inversionistas afectados por las restricciones financieras impuestas tras la crisis de 2001.
“Terminamos de pagar el corralito. Sin deuda, somos más libres”, dijo el Ministerio de Economía en su página web, cuando el contador digital que desde hace días llevaba, hasta en segundos, la cuenta regresiva para el pago de los bonos Boden 2012 llegó a cero.
El pago de hoy fue inscrito por el Gobierno de Cristina Fernández como el cierre de un “ciclo histórico” de fuerte endeudamiento de Argentina que culminó con la debacle financiera de 2001, que incluyó las restricciones al retiro de depósitos bancarios, un cese de pagos por 102.000 millones de dólares y una caída abrupta en la actividad económica y el nivel de empleo.
La presidenta argentina dijo este jueves 2 de agosto en un acto en la Bolsa de Buenos Aires que la cancelación del Boden 2012 “no es para festejar” porque “las deudas no se festejan” y subrayó que cumplir con las obligaciones “no debería ser ningún mérito”.
“Pero lo cierto es que se convierte en meritorio en una Argentina que permanentemente bicicleteaba su deuda y la terminó defaulteando (cayendo en cese de pagos). Y es también muy virtuoso hacerlo en un mundo donde todo se está derrumbando”, consideró la Mandataria.
Los Boden 2012 fueron emitidos en julio de 2002, en plena crisis financiera, para ser entregados a los clientes bancarios cuyos depósitos quedaron atrapados en el denominado “corralito”.
“Los Boden 2012 no es otra cosa que el dinero que debían haberle devuelto los bancos a los ciudadanos y ciudadanas argentinas”, consideró Fernández, que apuntó que el endeudamiento siempre lo termina pagando el Estado.
En total se han emitido 19.600 millones de dólares de estos títulos que se fueron cancelando en cuotas desde 2005 y la última fue la que venció hoy.
“El pago del Boden 2012 constituye un hecho especial: es el cierre de una etapa marcada por una política económica que colapsó”, dijo el economista Pablo Tigani, director de la Fundación Esperanza.
Según fuentes oficiales, el 78 % de los acreedores que cobraron hoy está fuera de Argentina, principalmente fondos de inversión de Estados Unidos, Luxemburgo, Italia, Francia y Dinamarca.
Fernández ha ratificado este jueves su voluntad de mantener una política de desendeudamiento para garantizarse “independencia” en el marco de la crisis global.
De acuerdo a datos oficiales, la deuda pública Argentina en manos de privados emitida en moneda extranjera pasó del 92 % del PIB en 2002 al 8,4 % tras la cancelación hoy de los Boden 2012.
En términos globales, la deuda pública total de Argentina en relación al PIB bajó del 168 % en 2002 al 41,8 % sobre finales de 2011 y mientras hace 10 años el país necesitaba el 815 % de sus reservas monetarias para pagar la deuda en moneda extranjera a privados, hoy sólo requeriría el 88 %.
Este nuevo perfil de deuda, según Fernández, le da a Argentina “una inmensa independencia frente a la volatilidad de los mercados” y le permite actuar “eficazmente” en un contexto de crisis global.
“Tenemos que seguir en la tarea de desendeudar para no caer en lo que precisamente está viviendo hoy el mundo desarrollado de una forma dramática y que nos termina también impactando a nosotros”, afirmó la mandataria.
Para 2012, el Gobierno argentino dispuso a través del Presupuesto el uso de 5.674 millones de dólares de las reservas excedentes del Banco Central para pagar deudas públicas.
Los vencimientos totales de deuda previstos para este año ascienden a 44.808,4 millones de pesos (9.805 millones de dólares) y el de hoy es uno de los mayores de 2012.
El otro gran compromiso será en diciembre, cuando Argentina debe pagar 3.435 millones de dólares a los tenedores de bonos de deuda con cupones atados al crecimiento de la economía local, instrumentos emitidos en el marco de la millonaria reestructuración de la deuda de 2005.